Si tenés muchas ganas de comer algo dulce pero querés evitar sumar calorías de más a tu dieta, te ofrecemos tres opciones que se adaptan perfectamente a tu objetivo: disfrutar de un buen postre pero ultraliviano.
Las recetas del doctor Cormillot
Ingredientes:
- 4 pocillos de arroz integral
- 1 litro de leche descremada
- 1 cdta de esencia de vainilla
- 1 cda de azúcar
- 1 cda tamaño postre de edulcorante
- Ralladura de limón
- 1 pizca de sal
- 2 cdtas de fécula de maíz
- Canela, a gusto
Preparación:
Colocar el arroz en remojo con la leche durante toda la noche en la heladera, luego agregar el azúcar, el edulcorante, la esencia de vainill, la sal y la ralladura de limón. Cocinar a fuego lento, revolviendo de vez en cuando para que se haga una preparación bien espesa. Cuando el arroz esté bien cocido, verter la fécula disuelta en agua fría y revolver para espesar bien. Enfriar y servir cubierto con canela molida.
Avena con frutas
Ingredientes:
- 8 cdas de avena tradicional
- 2 tazas de agua
- 750 cc de leche descremada
- 1 rama de canela
- 2 rodajas de ananá cortadas en triángulos
- 2 manzanas cortadas en gajos y rociadas con jugo de limón
- 2 cdas de miel
- 2 cdas de azúcr morena
- 1 pote de crema light
- Frutas secas y deshidratas a elección
Preparación:
Colocar en una olla el agua y la leche a fuego lento junto con la canela. Cuando comience a hervir, verter la avena y revolver continuamente unos 15 mintuos, aproximadamente, hasta que esté bien cocida. Agregar, entonces, la crema y continuar la cocción revolviendo 5 minutos más. Retirar del fuego e incorporar la miel y el azúcar, servir en potes individuales, decorar con la fruta elegida y acompañar con las frutas secas y deshidratadas.
Mosaicos con corazón dulce
Ingredientes:
- 16 tapas de pastelitos para freir
- 200 graos de dulce de batata light
- Leche par pintar la masa
Preparación:
Colocar la mitad de las tapas para pastelitos sobre una mesada enharinada y, en el centro de cada una, acomodar un cuadradito pequeño de dulce. Luego humedecer los bordes de la masa y colocar la otra tapa sobre la anterior haciendo coincidir las puntas en forma de mosaico. Presionar los bordes con un tenedor para sellarlos, de manera que no se abra al cocinar y pinchar la masa con el tenedor haciendo figuras cuadradas simulando un mosaico. Pincelar con leche y cocinar en el horno hasta que se doren bien. Enfriar y servir con el café.
