Lo que se debe hacer (y lo que deberíamos evitar) para mantener nuestras uñas saludables son estos tips muy fáciles de emplear, logrando buenos resultados en poco tiempo.
1- Longitud
Las uñas más largas están más expuestas a las roturas y además, son más propensas a acumular microorganismos bajo ellas y que estos generen una infección.
2- Alimentación
La clave está en mantener una dieta rica en vitaminas y en minerales. Zinc (carnes rojas o avellanas), hierro (en mariscos, espinacas y carnes rojas), vitamina C (brócoli, pimiento rojo, kiwi, naranja...), vitamina D (luz solar) y la vitamina E, hidratante y antioxidante presente en las almendras, las avellanas, las hortalizas de hoja verde o los aceites vegetales.
3-No abusar de esmaltes de mala calidad
Ni todos los esmaltes son malos, ni recurrir a menudo a los esmaltados en gel daña las uñas: lo que realmente las daña son los esmaltes de mala calidad, cuyos componentes químicos pueden dificultar la creación natural de la queratina.
4- Protegerlas de químicos
Exponer las uñas todo el tiempo a los productos de limpieza puede resultar muy nocivo. Si bien pueden resultar algo incómodos, lo ideal es acostumbrarse a utilizar guantes de goma para las tareas que impliquen un contacto con estos químicos.
5- Evitar la humedad
Secar las manos y uñas a conciencia, evitar ambientes húmedos como llevar varias horas guantes y mantener una correcta hidratación, son las claves en este punto.
6- Hidratarlas
Utilizar todos los días alguna crema de manos hidratante no sólo fortalece las uñas y las endurece, sino que mantiene en buenas condiciones la piel de las manos.
