Corría 1998 cuando, de casualidad, dejando por un rato su apretada agenda como directora de una agencia de medios que ella misma había fundado, Beatriz Goyoaga, periodista experta en política y economía, se acercó hasta el teatro San Martín para asistir a una meditación que daba el maestro indio Sri Sri Ravi Shankar.
Sin haber meditado nunca ni creer que la meditación fuera para todo el mundo, lo que presenció ese día cambió el rumbo de su vida. "Practicar esa sesión de meditación me puso el cerebro como en un quirófano", dice recordando esa práctica inicial para ella. "Digo quirófano por lo limpio, pristino y silencioso. Así que cuando salí de ahí me dije a mí misma que había que buscar que había detrás de esto", afirma Beatriz, nacida en Madrid, pero radicada en Buenos Aires.
Ese fue el germen de la fundación El Arte de Vivir en la Argentina, que Beatriz se encargó de abrir sus puertas hace ya 22 años. "Indagué en el curso de manejo del estrés laboral y establecí la fundación aquí en América Latina", afirma Goyoaga. "Crecimos de manera sustancial, ahora somos cinco instructores en el mundo", dice, con orgullo.
Sensibilidad y fortaleza gracias a la meditación
¿Qué fue lo que le pasó con esa primera meditación que realizaste con Sri Sri Ravi Shankar?
- Yo sentí solamente que mi mente reposaba y se suspendía como nunca había sentido antes y entonces dije, debe haber algo detrás. Sentí después mucha alegría, mucho foco, mucho bienestar. Dije hay que salir a comunicarle a la gente que, a pesar de las circunstancias -porque yo sigo siendo deportista, ama de casa, periodista, mi vida sigue siendo normal, no me metí en ningún convento ni en un templo budista, sigo siendo católica con mucho respeto por todas las religiones-, ahora tengo equilibrio y soy una mujer muy fuerte. Antes era una intelectual, ahora soy una mujer mucho mas sensible que antes.
¿Y eso es gracias a la meditación?
-Así es, gracias a la meditación, que en el caso mío ha sido siempre acompañada de la respiración. Que para que se entienda, son dos ejes troncales pero complementarios, como el scon y el té. Son distintos pero se complementan. La respiración sería como limpiar el vidrio del auto si tienes barro y la meditación es profundizar y ver claramente. Yo uso siempre las dos, desde hace 22 años.
¿Cuánto tiempo del día le dedicás a la práctica de ambas?
-Unos 15 minutos a cada una, por la mañana y por la tarde. Hay días que tengo más tiempo, y otros no, pero eso es lo que dedico por día.
-¿Lo recomendás para todas las personas incluidos los niños?
Los niños a partir de los 6 años ya pueden meditar, y les hace mucho bien. Los padres suelen venir y preguntar que hemos hecho que los ven tan bien, entonces es un gran beneficio, para todos.
Calmar la ansiedad en pandemia
Tu trabajo en la pandemia se ha incrementado notablemente, por la cantidad de gente que ha solicitado hacer cursos, ¿no es verdad?
- Si, la demanda se ha incrementado por cinco por la pandemia. He estado dando talleres sin costo, dos o tres veces por semana, a cientos de personas. Fueron más de 13 mil las personas que han tomado los programas, entre ellos personal de salud y de seguridad, docentes... Es que hay muchos miedos, inseguridad, se ha incrementado la violencia en las calles, violencia familiar, la ansiedad. Es decir, nuestro trabajo que ya venía siendo abundante, ahora se multiplicó por el crecimiento de la segunda pandemia que es de la ansiedad.
¿Por qué la respiración ayuda a calmar la ansiedad?
-La respiración trabaja con las emociones. Si tu te fijas, cada persona que tiene una emocion tiene un tipo distinto de respiraión. Cuando estás deprimido exhalas, cuando estás estresado jadeas, cuando sufres un atraco se te corta la respiración.
La respiración está unida a las emociones del mismo modo que el corazón está unido a la sangre. En cuatno a la meditación, tabaja a nivel del hipotálamo y el nervio vago, que se relaciona con todo lo que hace el organismo por sí solo. Cuando tú te rejalas con la meditación, todo trabaja normalmente. Cuando estás estresado, se bajan las defensas.
La mujer que entrevistó a Lady Di
Hablemos de tu etapa como periodista. ¿Cómo llegaste a entrevistar a personalidades como Lady Di y la reina Isabel?
-Yo he sido años corresponsal del Daily Mail de Inglaterra y cuando estuve en unos de mis viajes en Africa, allí estaba la familia real de visita. Entonces le pedí al protocolo si me permitían hacerle una nota a la reina y accedieron. También entrevisté al príncipe Carlos.
A Diana la entrevisté en Argentina y me pareció una princesa de ensueño, verdaderamente una princesa de cuento de hadas. Se bajó del avión estabamos los periodistas esperándola, era una cabeza más alta que todos, pestañeaba y los fotografos se caían. Era muy bonita y muy normal, por ejemplo llevaba las uñas pintadas en desacuerdo con el color del traje, era muy normal.
Diana me dijo que a ella le gustaría que sus hijos no fueran marionetas de la corte y que se fueran a Africa a hacer voluntariados, a ayudar a la gente. Tenía sentimientos humanos muy bonitos.
También entrevistaste a Nelson Mandela...
-Sí también entrevisté a Mandela en Sudáfrica, a poco de salir él de la cárcel. Un hombre muy profundo que me dijo "yo no quiero que corran ríos de sangre por mi país, así que nada de hacer venganza ni nada de eso", a pesar de haber estado en la cárcel injustamente durante tantos años. Muy agradable.
La vuelta al mundo dos veces
Viajaste mucho en tu vida. ¿Qué países visitaste?
-Dí sola la vuelta al mundo dos veces el perímetro de la Tierra. Llevo viajando 17 años. Yo creo que hay solo dos o tres países del mundo que no he conocido, así que mejor nombrar los que no he visitado antes que los que sí he conocido. He estado en todos los continentes, he viajado a la Antártida en el Almirante Irizar, he ido al Polo Norte con los criadores de renos, he cruzado el desierto de Arabia en 4x4... mucho, mucho viaje.
¿Y qué sentiste al visitar la India? ¿Sentiste deseos de vivir allí?
-Estuve antes de El Arte de Vivir y también después, pero no, yo no me siento de la India ni considero que tengo una cultura de ese país maravilloso. Yo soy una ciudadana del planeta, a donde voy me siento bien, voy a Madrid y me siento estupenda, voy a Mexico y lo mismo. Amo la Argentina, por eso me he quedado. Pero no siento que me quiera ir a la India.
¿Cuánto hace que vivís en Argentina?
-Hace 27 que vivo aquí, estoy asentada, pero nunca sé qué me deparará el destino. He vivido en siete países residiendo, estuve cuatro años en los Estados Unidos, dos en Francia, fui a estudiar a Inglaterra y a Alemania, pero soy ciudadana del planeta. Estuve casada dos veces, una vez con un alemán y otra vez con un italiano que conocí aquí, que ya falleció y fui muy feliz con él.
"No soy madre biológica pero no lloro por eso"
Alguna vez dijiste que no has sido madre biológica pero que no te sentás a llorar por eso... ¿No te pesa no haber tenido hijos entonces?
-No, para nada. Solamente a eso de los 30 y pico lo pensé y le dije a mi marido qué te parece tener un chico. Y él me dijo "a vos te parece con la vida que llevas de país en país"... y no dije nada. No era para mi, no me duele, veo a los bebés y me encantan, pero considero que cada uno tiene un rol en su vida.
Por otra parte no he tenido hijos pero atiendo 47 mil alumnos, a los cuales cuido y atiendo por WhatsApp, conteniendo sus emociones. Yo creo que Dios quería que mis hijos fueran estos alumnos de hoy.
También has dicho que la edad que sentís que tenés son 40 años...
-Sí, y el proximo 21 de marzo voy a cumplir 37 (risas) … Y si te fijas en Google, una de las preguntas más realizadas a Beatriz Goyoaga es la edad que tiene, pero no lo vas a encontrar en ningún lado … Pero con 37 yo estoy bien... Tengo amigos de 40, de 18, de la edad que quieras, y con todos me divierto y a todos cuido.
Un mensaje por el Día de la Mujer
También leí una frase tuya que dice "en épocas de crisis ser mujer es un honor"...
-Es así. Ser mujer es un honor porque somos fuertes, somos pilares, estamos hechas para el parto, para apoyar, muchos varones que son del sexo fuerte por así decir, van de los brazos de la mamá a los brazos de la esposa. Las que cuidan a los papás ancianos somos el 90 por ciento las mujeres, y quiero decir que todos tenemos mitad masculino y mitad de femenino, y yo no estoy a favor ni de uno ni de otro, porque todos estamos hechos 50 y 50.
¿Nos darías un mensaje por el Día Internacional de la Mujer?
-Celebremos ser mujeres que somos muchas. Por algo nos ha hecho tan abundantes el universo, porque necesitamos apoyar, como mujeres madres, parejas, hermanas, jefas, tenemos que ser conscientes de nuestra fuerza, no bajonearnos y ser puntales, para que se apoyen muchos sobre nuestros hombros.
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