Ashley Graham sigue conquistando el camino de la inclusión en la moda. Con motivo del lanzamiento de su quinta colección cápsula de trajes de baño -Swimsuits for all (para todos) -la modelo curvy decidió convocar a su madre, Linda, para formar parte de la campaña que tuvo como escenario las increíbles playas de Marruecos.
La abanderada global de movimiento xl colabora con sus diseños inclusivos, y una vez más desafió los límites de belleza invitando a su madre de 53 años a posar en bikini. "Decidí hacer este trabajo junto a mi madre porque es mi modelo a seguir desde mi infancia y jugó un papel fundamental en el desarrollo de mi confianza", dice orgullosa Ashley a la revista People.
Desde que Ashley- saltó en escena fueron incontables sus logros en materia de diversidad, propagando el lema bodypositive que celebra el empoderamiento corporal, dando visibilidad aquello que antes prefería ocultarse.
"Ella promovió la positividad corporal en casa antes de que fuera un movimiento real. Su actitud de sentirse bien con su propio cuerpo me enseño a mantenerme positiva y segura de sí misma ", agrega. "No podría pensar en alguien mejor para unirse a mí en la celebración de la belleza de todas las formas y tamaños".
Decidida y activista, no tuvo ningún tipo de inhibiciones a lo largo de su carrera que comenzó cuando ella tenía 12 años. Fue la gran protagonista del Fashion Week de Nueva York en 2016, con un desfile de ropa interior diseñada por ella misma con la ayuda de otros profesionales. Lo mismo sucedió la edición pasada, elegida por Michael Kors compartiendo escena con modelos de talle estándar como Bella Hadid o Kendall Jenner.
Para la mamá de Ashley también fue todo un reto esta producción "¡No usaba bikini desde los 80!", recordó Linda. "No creo haber podido descubrir esa fuerza interior sin Ashley. Eso hace esta campaña mucho más especial: ella es mi roca y me inspiró a los 53 años a volver a estar orgullosa de mi cuerpo".