Tiempo antes de asumir en su rol de primera dama de los Estados Unidos, la elección de los looks de Melania Trump, ya daban que hablar generando un debate en torno a su estilo.
Primero comenzaron las especulaciones alrededor de su transformación de vestuario - por su pasado de ex modelo sexy - luego quién la vestiría -debido que los diseñadores que se negaban hacerlo frente a la postura política de su marido Donald Trump y por último,(un detalle no menor) el alto presupuesto destinado a su lujoso guardarropas. Muy a pesar de todo, a lo largo de estos 12 meses, Flotus (por sus siglas en inglés) se impuso como una de las mujeres más influyentes de la moda.
EL ESTILO DE MELANIA. Para sorpresa de muchos, demostró que es sofisticado y glamoroso, con detalles de lujo que muchas veces rozan lo osado. Su porte natural le permiten lucir cualquier pieza, hasta diseños de alta costura presentando las últimas tendencias de la moda, cosa que aveces la hace confrontarse con el protocolo exigido.
Su guardarropas es 100% internacionales con devoción a maestros como Dior, Emilio Pucci, Louis Vuitton, Hervé Pierre , Del Pozo, y fetiche Dolce & Gabbana. Aunque también le da lugar a las boutiques nacionales como Michael Kors y Ralph Lauren.
En cuanto a la silueta predominante, también tiene su preferida, “sigue eligiendo prendas entalladas que marcan su figura, recurre a detalles llamativos como grandes mangas, volumen, colores vivos, texturas como cuero en faldas y pantalones, bordes deshilachados, abrigos entallados de manga larga a las que en ocasiones deja sin usar”, explica Laura Malpeli de Jordaan, asesora de imagen directora de Styletto.
Según la especialista estas particularidades dentro de sus outfits le permiten alejarse de lo clásico y más tradicional para subir la apuesta. “Ahí está presente el elemento chic dentro de sus looks que fueron surgiendo y marcando su impronta en su rol actual”.
Las comparaciones directas con otras primeras damas, en especial con su antecesora Michelle Obama , son habituales. "Si bien es una mujer de un estilo muy definido, este ha ido mutando hacia un look más sobrio y similar al de Michelle", resalta Yamila Pica, asesora en imagen a cargo de Plushamor.
A diferencia de Michelle, Melania no apuesta al diseño nacional, ni tampoco repite outfits y en mínimas ocasiones se inclina por diseños low cost. Sin embargo, siguiendo la tendencia global de las referentes de estilo como Kate Middleton, Máxima Zorreguieta o Juliana Awada, se anima a los prendas informales, como las zapatillas, las gorras y los jeans blancos.
LOS INFALTABLES DE MELANIA. En eventos protocolares es una abanderada del power dressing por lo que prefiere los vestidos de largo midi con corte a la cintura, con y sin estampa, detalla Pica. También los equipos de dos piezas -el clásico tailler- pero en su versión moderna. Abrigos en forma de vestido, stilletos como complemento perfecto y su amada colección de anteojos -cuadrados, aviadores o cat eye.
4 OUTFITS ELEGIDOS
Asunción de Trump
Para Malpeli, su atuendo resultó sumamente acertado por los siguientes motivos:
- lució un atuendo de Ralph Lauren en vez de diseños extranjeros
- se la comparó con Jackie Kennedy y su estética
- fue suficientemente sobrio y correcto para la ocasión
- no opacó al presidente
- el color elegido fue ideal: por ser tan claro, no proyecta autoridad ni genera distancia como haría un azul marino intenso o un azul noche. A su vez, varios interpretaron la elección del celeste como mensaje de unidad que se transmite en esta variante clara de azul.
Baile presidencial
Supo cómo destacar su figura con el vestido que lució en la gala inaugural, llevando la atención a distintos puntos del cuerpo, siempre con una estética femenina."Los hombros al descubierto, el detalle del volado en diagonal en el torso, el contraste con el color del cinto angosto y el tajo alto en la falda son los puntos focales del vestido, co-diseñado entre la primera dama y Hervé Pierre", destaca la especialista.
Aquí no lució un vestido de un diseñador estadounidense. El color resultó sumamente sentador para su tez, color de ojos y cabello y un gran acierto fue llevar el cabello suelto y con un leve movimiento, en concordancia con lo que representa el vestido en sí: corte clásico pero detalles no tan tradicionales, incorporación de tendencia y en este sentido, pudo plasmar una imagen elegante y para nada monótona.
En esta ocasión, el traje de Ralph Lauren le sirvió para mostrar una imagen más andrógina y proyectar más autoridad o relevancia. "Las líneas rectas verticales del saco y el pantalón, el corte de este último son elementos que le permiten verse más alta aún", dice Malpeli de Jordaan.
Los toques femeninos suavizaron la propuesta: cabello suelto con volumen, maquillaje con esfumado en los párpados y los infaltables stilettos, en este caso, negros, que solo quedaron a la vista cuando estuvo sentada.
En China, noviembre de 2017
Nuevamente recurre a un diseño europeo, en este caso de la mano de Gucci y se observa este guiño a la cultura del destino a través del diseño, la textura y el motivo. "El atuendo de escote cerrado le permite mostrar piel en la zona inferior y de paso, destaca el calzado que es parte de su marca registrada, stilettos, en este caso en un tono rosado", explica Malpeli de Jordaan.
" Otro elemento que logra ser el centro de las miradas son los puños de las mangas, por la textura, el grosor, el color y por estar estratégicamente colocados de modo que permiten destacar su cintura definida. Se destacan los brazos cubiertos y los detalles de mangas: un elemento recurrente en los looks de la primera dama", concluye la especialista.
Este fue el resumen del primer año, habrá que esperar por los próximos para evaluar si mantiene su estilo lo se transforma.
Fotos: Fotonoticias, Reuters, Getty