Asegura que tiene el cuerpo de cuando tenía 16 años. Desde hace un tiempo sigue una fórmula que fue clave para mejorar su calidad de vida. Y no se lo guarda: divulga los tips y su rutina en las redes sociales y en la página de su marca de cosméticos.
“Alimento, movimiento y descanso. Una fórmula de tres palabras mágicas que me ayudaron a llevar una vida más sana y consciente”. Así Guillermina Valdés reveló en sus redes sociales cómo hace para verse cada vez mejor.
“Me informé, investigué, leí y aprendí. Y por eso les quiero compartir algunos secretos de mi rutina de cuidados que me permiten sentirme con energía y en armonía”, dice invitando a visitar la página en la cual promociona su marca de cosmética.
Hace algunos años que buscó una vida más saludable. “Curiosa por naturaleza, desde chica me interesó investigar y conocer cómo funciona el cuerpo, cómo influye lo que consumimos en nuestro organismo y qué podemos hacer para llegar a la vejez de una manera más amigable”, explica.
Y sin duda, la alimentación fue clave para cambiar su vida. “¿Qué impacto tiene lo que comemos en nuestro ánimo y en la energía con la que hacemos nuestras actividades diarias? El diagnóstico de celiaquía de mi hija Paloma y la enfermedad de mi papá me ayudaron a profundizar más sobre lo nocivos que pueden resultar ciertos alimentos como el azúcar, el gluten, los envasados y todo lo que contenga conservantes”, comenta Guillermina que ahora se convirtió en toda una experta en el tema.
Al acompañar a su hija, pudo comprobar de primera mano los beneficios de seguir una dieta libre de gluten. Eliminó de su dieta los cereales, los procesados y redujo el consumo de azúcar.
“Conocí las grasas y las proteínas de calidad y me abrí a las bondades de los alimentos en su estado más natural. Aprendí a hacer elecciones conscientes sin que esto repercuta en mi vida social o mi trabajo. Sé perfectamente cómo debo alimentarme y qué alimentos son los que le hacen bien a mi cuerpo sin renunciar a comer rico y variado. La mejora en mi estado de ánimo, energía y físico fue enorme”, cuenta.
Por otra parte, descubrió cuán importante era el descanso en su vida. “Sin un adecuado descanso, tener un buen estado de salud es casi un objetivo imposible. La falta de sueño altera el metabolismo, genera un consumo deficiente de calorías (que puede conducir a un aumento o descenso de peso) y repercute en el reloj interno que controla nuestros procesos vitales. Lo viví en carne propia: estuve un año entero sin poder dormir y, finalmente, cuando recuperé el necesario descanso, el cambio fue muy positivo”.
También percibió cambios en su piel: “se volvió más luminosa, mi expresión era diferente y empecé a moverme más, con más alegría y energía. Somos seres diurnos y esto implica dormir y ayunar de noche, movernos y nutrirnos durante el día”.
El movimiento es otra de las palabras clave de su fórmula para sentirse y verse mejor. “Después de cada uno de los cuatro embarazos, y especialmente en el de Lorenzo (el hijo que tuvo con Marcelo Tinelli), la pérdida de masa muscular se hizo cada vez más evidente y sentí que era necesario hacer algo para recupera el tono que había perdido”.
Entrena haciendo ejercicios que involucran a todo el cuerpo de manera coordinada: “empecé a entrenar solo con mi cuerpo. Después sumé peso libre y los resultados me impresionaron. Hoy hago trabajos que combinan la fuerza, la movilidad y la concentración. Al cabo de un año mi cuerpo se transformó: mucho más fuerte, erguido y con la musculatura que había tenido a los 16 años”, asegura Guillermina.