El verde esmeralda es el tono que viene fuerte para la primavera. Es un color difícil de llevar pero Marité Rizzo, la editora de moda de Para Ti, te cuenta cómo usarlo para no equivocarte.
Lo veremos en todos lados y a todo hora. El verde esmeralda es el color protagonista de la temporada. Pero no es un tono fácil a la hora de combinarlo.
La manera más sencilla de usarlo es en color block. Es decir, todo el outfit de ese mismo tono. No hay dudas ni peligro de equivocarse.
Es un color que invita a animarse a nuevas combinaciones. Se potencia con otros colores y adquiere una nueva dimensión. Podés probarlo con colores opuestos como el rosa, violeta, amarillo o celeste.
En 1814 una compañía alemana llamada Wilhelm Dye & White Lead Company fue la que dio vida a este pigmento que de inmediato se lo relacionó con el color de la joya. En aquel momento lo denominaron “verde París” y se impuso como color de moda.
Sin embargo, su fórmula era secreta porque uno de sus componentes, el arsénico, es peligroso para la salud. Su efecto colateral: provocaba úlceras en todo el cuerpo. Uno de los casos más llamativos del momento fue el de Matilda Scheurer, una florista de 19 años que murió por la exposición diaria al arsénico al teñir flores de forma artificial, una moda arraigada en la sociedad victoriana.
El verde esmeralda resurgió con dos looks recientes: el de JLo con el vestido de Versace y el de Kiera Knightley en la película “Expiación”. Gyvenchy es una de las firmas que apostó a este color en su colección de verano.