La pionera de la aviación es la protagonista del especial “En busca de Amelia” que se estrena este fin de semana en la tevé. Conocé más sobre esta legendaria mujer superpoderosa que sigue conquistando al mundo.
Este domingo 3 de noviembre, a las 22, y durante dos horas, una expedición de National Geographic a cargo del explorador submarino Bob Ballard intentará resolver uno de los grandes enigmas de nuestra época: ¿Dónde está Amelia Earhart?
El trágico destino de la célebre pionera de la aviación, sinónimo de aventura y coraje, es parte clave de la gran historia de esta aviadora y dio lugar a las mil y una especulaciones. El especial "En busca de Amelia" procurará develarlo.
Y al frente de la búsqueda de una gran mujer… ¡otra gran mujer! La travesía oceánica se llevó a cabo a bordo del EV Nautilus, bajo la dirección de Allison Fundis, directora general de operaciones y líder de la expedición. Junto con ella, Ballard reunió a un grupo de técnicos y científicos especialistas de Amelia Earhart, para el viaje que duró un mes, en agosto pasado, desde Samoa hacia un remoto atolón del Pacífico llamado Nikumaroro, en la República de Kiribati, donde un equipo arqueológico -por medio de perros de rastreo, detectores de huesos, pruebas de ADN y excavaciones- investiga el posible lugar en donde habría acampado Earhart, la verdadera estrella de este documental que habla de cómo se convirtió en una de las figuras más fascinantes e inspiradoras de la historia.
Una pionera del feminismo
“Siempre me fascinó la historia de Amelia Earhart porque ella impactó al mundo haciendo lo que todos creían imposible, lo mismo que yo intenté hacer durante toda mi carrera como explorador de aguas profundas -contó Ballard- Además, como Amelia, yo nací en Kansas, así que lo más apropiado es que una persona oriunda de Kansas sea quien resuelva el misterio”.
Amelia Earhart nació en Atchison, Kansas, en 1898, y desde muy temprana edad mostró un gran interés por educarse y formarse. Cursó estudios en la Universidad de Columbia y en Harvard y se implicó en los problemas de su tiempo al actuar como enfermera en un hospital de campaña canadiense durante la Primera Guerra Mundial.
A los 10 años, vio su primer avión, y dijo: “Es una cosa de alambre oxidado y madera, y no tiene nada de interesante”. En 1921 compró su primer avión, al que bautizó “Canario” y con el que superó los 4270 metros de altitud. Y en 1928, se convirtió en la primera mujer en volar sobre el Atlántico como pasajera de un vuelo pìlotado por Wilmer Stultz y Louis Gordon. Ese mismo año emprendió ella misma vuelos en solitario por todo Estados Unidos.
Es uno de las mujeres más populares y relevantes de la historia reciente. Y no solo realizó hazañas que superaban lo que la sociedad de entonces esperaba de ella, sino que resaltó valores feministas que promovían la igualdad (en 1929 fundó una organización de mujeres aviadoras) y demostraban lo alto que podía llegar una mujer, literalmente. Su carrera como piloto la llevaría a ser una heroína en los Estados Unidos y un referente en el resto del mundo.
Amelia en el cielo
Amelia saltó a la fama mundial cuando, en 1932, fue la primera mujer en cruzar el Atlántico “en solitario”, cosa que solo había conseguido Charles Lindbergh en 1927 con su mítico Espíritu de San Luis. Su hazaña fue en tiempo récord -13 horas y 50 minutos- y le valió la Cruz Distinguida de Vuelo del Congreso de los Estados Unidos.
Fue la primera mujer en recibir la “Medalla de Oro Especial” de la National Geographic Society en 1932. Desde ese momento, Amelia Earhart pasó a ser un personaje público admirado en todo el país y su notoriedad le permitió promocionar el uso comercial del transporte aéreo y la incorporación de las mujeres al sector.
En 1935 realizó un vuelo en solitario desde Honolulú a Oakland, el primer viaje con éxito realizado entre las islas del Pacífico y los Estados Unidos, y ese mismo año superó un nuevo récord de velocidad al llegar a Nueva York desde Ciudad de México sin escalas. En 1937 se embarcaría en su última misión: dar la vuelta al mundo siguiendo la línea del ecuador en lugar de las rutas tradicionales por el hemisferio norte que solían emplearse.
Ella y su copiloto, Frederick Noonan, llevaban dos tercios del recorrido total cuando, el 2 de julio de 1937, se perdió toda comunicación con ellos. Amelia tenía 40 años, y su destino de leyenda estaba asegurado.
Las teorías sobre su desaparición
La creencia más extendida es que su avión, un bimotor Lockheed Electra 10-E, se quedó sin combustible o sufrió algún problema técnico y se estrelló, provocando la más que probable muerte de la piloto y su acompañante. Otras hipótesis señalan que Earhart y Noonan sobrevivieron, naufragaron en una isla o fueron arrestados por las autoridades japonesas.
La popularidad de Amelia Earhart hizo que el gobierno de los Estados Unidos invirtiera grandes cantidades de dinero en encontrar sus restos, pero al no conseguirlo se les declaró muertos dos años después de su desaparición. Sin embargo, la posibilidad de que sobreviviera se vio reforzada en 2017, cuando se halló una fotografía en las islas Marianas en los Archivos Nacionales –tomada durante una misión de espionaje- en la que se ve a dos personas que podrían ser Earhart y Noonan. Los análisis demuestran que la fotografía es auténtica y no está retocada.
Ahora, National Geographic y Bob Ballard, el explorador submarino que en 1985 encontró el Titanic, se han propuesto resolver el misterio que sobrevuela alrededor de la desaparición de Amelia Earhart. “La mayoría de nuestro equipo son mujeres en posiciones de liderazgo y autoridad –destaca Ballard- Así que esta expedición también es una celebración de quién fue Amelia y por qué su historia sigue siendo tan cautivadora y actual hoy en día”.