Después de sus vacaciones, la modelo y empresaria compartió el final de su primer entrenamiento de la temporada. Te contamos su rutina y ejercicios.
Luego de un año de mucho crecimiento, Guillermina Valdés se tomó fin de año para descansar en Punta del Este justo a su familia y amigos…. ¡Pero ya era hora de volver al ruedo! “Haciendo los deberes x primera vez este 2020 (trato de meter 3 veces x semana?)”, aseguró la mujer de Marcelo Tinelli en su último foto de Instagram, posando junto a una fitball y con las pesas de fondo.
Según contó Guille en una nota que escribió para la página web de Giuv (marca de cosmética clean que lanzó el año pasado), para verse bien no hay secretos ni fórmulas mágicas. Ok, suena a frase armada, pero ella misma da fe del cambio físico que vivó luego de empezar a hacer musculación. “Después del nacimiento de Lorenzo, mi cuarto hijo, yo rondaba los 37 años y la pérdida de masa muscular se había hecho evidente. Fue entonces cuando conocí el entrenamiento de fuerza”, explicó la empresaria.
Strong is the new beauty
Peso muerto, sentadillas, thrusters, estocadas o fondos de banco. Estos son algunos de los ejercicios que suelen combinarse en los entrenamientos de que apuntan a evitar la pérdida de masa muscular y que, además, definen la silueta, fortalecen la estructura ósea y aceleran el metabolismo. “Mi entrenador, Ezequiel Rearte, me explicó que el ejercicio aeróbico está sobrevalorado. Desde los años ´60 se cree que es el medio por el cual uno puede obtener un cuerpo fit y un buen estado físico. Pero, lo que hoy sabemos es que, si bien tiene su importancia a la hora de crear un déficit calórico, cuando lo que buscamos es invertir el poco tiempo que tenemos en mejorar la movilidad, el entrenamiento de fuerza se lleva todo el mérito”, detalló Guille sobre su cambio de hábitos.
¿Qué tipo de aeróbico hace? ¡El cotidiano! Es decir: camina más, sube escaleras en vez de tomarse ascensores, disminuye tiempo frente a la pantalla, sale a pasear al perro o juega con los chicos. “Al principio me costó, tenía una concepción del movimiento que no era lo que él me estaba mostrando. Tuve que cambiar el chip y volver a empezar. Realmente fue un desafío y entendí que ese era el camino que tenía que transitar”, admitió @guillevaldes1. Hoy, a sus 41, la rubia vive uno de sus momentos profesionales y personales. Aunque esté a pleno con el trabajo y la familia, ella siempre se hace un espacio para invertir en su salud… tanto por dentro como por fuera.