Las cacerolas y otros utensilios pueden ayudar a marcar la diferencia en los espacios cotidianos. La decoradora Dolly Monclá cuenta cómo integrarlas a la cocina para lograr un ambiente único.
Los detalles y la funcionalidad de los accesorios son clave a la hora de pensar el diseño y la deco de los espacios.
Además de idear el piso, la mesada, el revestimiento de las paredes y la pintura, los elementos extras (incluso los que sirven para cocinar) pueden ser enormes ayudas cuando se quiere definir la personalidad de un lugar y marcar una diferencia.
De eso sabe Dolly Monclá, creadora de @foxdecoblog y embajadora de Essen Argentina: “el diseño es una parte fundamental de todo proyecto decorativo, pero los objetos más chicos, como las cacerolas, pueden convertir espacios standard, en ambientes con personalidad propia. Los elementos de cocina son complementos que consiguen transmitir sensaciones, momentos vividos, hacen que una casa se transforme en hogar”
¿Cómo agregarlos para potenciar un estilo?. Aunque no hay recetas universales, lo ideal, detalla Dolly, es que cada elemento se adapte a la paleta de colores elegida para la cocina.
Otra alternativa muy interesante es hacer justo lo contrario: “salirnos un poco de la paleta de colores, para lograr un desequilibrio, un efecto disrruptivo”, que haga mas atractivo el ambiente. En otras palabras, esta bueno una paleta consecuente, pero no hace falta el composé”, ejemplifica.
Accesorios de cocina con personalidad
En esa búsqueda propia por lograr una cocina auténtica, las cacerolas Essen pueden ser grandes aliadas.
Son súper funcionales (integran las funciones horno, vapor, grillados, frituras, salteados y baño maría) y están en sintonía con las tendencias. Son, además, imprescindibles para sentir la casa muy nuestra.
Hay distintas líneas (Contemporánea Aqua y Terra, Marsala y Moka) y cada una tiene productos de distintos tamaños que se adaptan a todo tipo de familias y necesidades.
Cocinar con diseño
Las cacerolas de buena calidad y que combinan tecnología tienen muchos puntos a favor. Nos permiten alimentarnos de una forma más casera y sana pero además se integran con todos los estilos decorativos.
Y algo más: son objetos que inspiran. Como dice Dolly, una cacerola nueva “genera esa adrenalina que hace que den más ganas de activar, cocinar, y probar nuevas recetas”. ¿Empezamos?