La marca visibiliza el oficio y el trabajo de las mujeres rurales de Santiago del Estero. La cestería y los textiles traducen saberes que se transmiten de generación en generación.
En trabajo compartido con las comunidades rurales, esta marca santiagueña liderada por Cecilia Roldán García y Luciana Mendoza, desarrolló un proyecto colectivo en alianza con las tejedoras de distintas localidades y zonas de la provincia.
Santiago Ancestral ofrece una delicada selección de piezas artesanales que fusionan saber y técnicas milenarias con el valor agregado del diseño.
Hay paneras, canastas o individuales y también mantas, alfombras y chales.
"Cada departamento tiene su arte, que se transmite de generación en generación, y entre vecinas: donde se hace uno, no se hace otro", cuenta Mendoza. Los telares se desarrollan en las localidades Atamisqui y Loreto y la cestería en las Termas de Río Hondo.
Manos artesanas
La producción es local y se utilizan los recursos naturales del territorio. Las ganancias contribuyen a la economía familiar de los grupos de mujeres que trabajan la cestería y los textiles.
Las emprendedoras buscan revalorizar la identidad santiagueña a partir de las técnicas ancestrales que permiten una vida digna y sustentable. Santiago Ancestral da cuenta del rol fundamental de la mujer campesina como sostén del hogar y hacedora de cultura, costumbres y empoderamiento.
Apuestan a la producción, al trabajo local digno y al respeto de los saberes de esas mujeres.
Estrategias de cambio
La marca se presentó en 2016 por primera vez en la Casa de Santiago del Estero y en la Feria Internacional de Artesanías. Desde entonces, no para de crecer.
Este 2020, después de implementar algunas estrategias sugeridas por Puro Diseño en las consultorías personalizadas que ofrece la marca, lanzaron su tienda e hicieron un catálogo nuevo y volvieron a repensarse para seguir generando alianzas positivas que impacten en su proyecto. Y en la vida de otras mujeres.
Conocé más en su tienda online.