Pampita pasó por mucho: la muerte de su hija Blanca y la separación de Benjamín Vicuña. Pero ahora, enamorada y casada con Roberto García Moritán, y embarazada de una nena, la vida le vuelve a sonreír. Está feliz.
Según el relato de Gabriel Olivieri en Intrusos, todo lo que le pasó a Pampita en el último tiempo está relacionado con un pedido que le hizo a Blanquita. De aquel pedido ella se refirió en la ceremonia de casamiento: "El 8 de febrero miré al cielo y dije: ‘Yo quiero un compañero en esta vida’". Mirando a los ojos a Roberto García Moritán, minutos antes de dar el sí, ella pronunció esas palabras en el palacio Sans Souci.
Días después en su programa contó que el 8 de febrero de 2019, estando en Chile había ido a visitar la tumba de su hija. "Fui a llevarle flores y le pedí un compañero en la vida", comentó en Pampita Online. Blanquita, su hija mayor, murió el 8 de setiembre de 2012, por eso los 8 son especiales tanto para ella como para Benjamín Vicuña.
"Los 8 para mí son súper especiales, días muy fuertes y es como mi día permitido en todo el mes para conectarme con algunos lugares dolorosos, y justo me coincidió en Chile. ‘Qué coincidencia -dije-. Voy a estar en Chile el 8’. Siempre los vivo acá (por Buenos Aires), porque vivo acá y no creo que vuelva a vivir en Chile", comentó la modelo.
"Entonces fui a llevarle flores a mi hija. Yo me sentía muy mal en ese momento, estaba muy triste. El año anterior había sido muy duro para mí y nunca le había pedido nada a mi hija, nunca jamás. Pero no sé por qué ese día estaba muy conmovida de estar ahí, la coincidencia, y le hice un pedido, de verdad, muy profundo. Fue de adentro. Un pedido de ‘quiero tener un compañero en la vida’", reveló.
"No pedí nada hasta ahora pero siento que me tenés que ayudar. Para mí es importante transitar la vida con alguien. Que me dé amor, y un amor que me dé paz, estar en calma. También agradecí todo lo que tenía, lo bien que veía a mis hijos en su vida, cómo estaban creciendo, hermosos. El trabajo también, como que había recuperado las riendas de mi carrera. Pero eso me estaba faltando y por mi forma de ser lo necesito", contó que le pidió a Blanquita.
Y ese mismo año conoció a Roberto y se casó con él. "La primera semana que estuve con él me di cuenta de que todo fluía tan fácil que me vi venir que era un amor verdadero. Rápidamente fui para atrás y me acordé de eso y dije: ‘Claro, es esto, está llegando lo que pedí’".
Y según Olivieri, aquel 8 de febrero, Pampita pidió algo más: "En un momento ella nos contó que había ido a Chile a la tumba de Blanquita y le había pedido a su hija que de una vez le ayude a tener un hombre y volver a tener un hijo porque ella quería seguir siendo madre", detalló en "Intrusos".
Y siguió contando: "Le iba a comprar escarpines rosa porque le dije a mi amiga, está embarazada y es una nena, como soy medio brujito Maya. Y mi amiga me dijo ¡Estás loco!... Al final, le dije no compremos rosa porque el mensaje es muy fuerte".
Y afirmó que: "Pampita esto lo ve como un mensaje de lo que le pidió a Blanquita. Es muy fuerte todo. Si uno se pone a pensar más allá del humor y de que nos encanta reírnos -porque a la vida hay que ponerle humor-, esto es demasiado fuerte y es un mensaje para las señoras, para las chicas, para todos nosotros, de que siempre la vida te da revancha....
Le mandó un compañero maravilloso... Además esto no se corta acá, yo te lo garantizo, como brujito maya que soy, como pampitólogo, ésta es la primera: va a venir otra criatura, acuérdense. Se tienen un amor descomunal y la familia... Pensá que la hija de Roberto tiene la edad que tendría Blanquita y parece una hija para ella, entonces es muy loco todo, pero yo estoy feliz porque es un ejemplo", concluyó Olivieri.
Más información en parati.com.ar
