Uno de los episodios más polémicos de la vida privada de Luis Miguel fue su vínculo con la actriz Stephanie Salas y el nacimiento de su primera hija, Michelle. En la primera temporada de Luis Miguel, la serie, vimos un poco sobre la relación entre ambos, pero en la temporada 2 el tema será tratado con mayor profundidad, según anunciaron sus creadores.
¡Alerta de spoliers! El capítulo 2 de la temporada 2 termina precisamente en el momento en que el Sol de México conoce a su hija Michelle en casa de "Sophi" (el nombre de Stephanie en la serie), le lleva un regalito y se abrazan mientras suena "Hasta que me olvides" con la brillante interpretación de Diego Boneta.
La serie, en su primera temporada, dio su versión de cómo se habían conocido los padres de Michelle durante su adolescencia: ambos eran estrellas mediáticas que por prensa debían aparecer juntos en eventos, lo que llevó a un par de encuentros ocasionales entre ambos, que dieron lugar al embarazo de Stephanie.
Por su parte, la cantante y actriz mexicana contó en una entrevista que conoció a Luis Miguel cuando ambos tenían 15 años y ella trabajaba en el musical juvenil Vaselina con la banda adolescente Timbiriche (en la que también participaban Paulina Rubio y Thalía).
Un amigo en común los presentó, se hicieron amigos y, según Stephanie Salas, a los 17 años empezaron a salir en un plan más romántico, pero no exclusivo o formal. Es decir, que nunca fueron novios oficialmente.
Stephanie —hija de Silvia Pasquel, nieta de Silvia Pinal y prima de Alejandra Guzmán— se enteró de su embarazo cuando tenía 18 años en un chequeo médico de rutina, le contó a Luis Miguel y, según declaró a un medio mexicano, lo vivió completamente sola ya que Micky siempre estaba de gira, en pleno lanzamiento de su disco pop "20 años".
Una fuente no identificada aseguró que luego del nacimiento de la niña, Luis Miguel reapareció en la vida de ambas. Salas dijo en la entrevista que “alguien le informó del nacimiento, se reportó y tuvimos un encuentro muy bonito en casa, agradable y emotivo” y añadió que las palabras del cantante fueron: “¡Cómo se parece a mí, está divina mi hija!” y dejó que estuviera a solas con Michelle, riendo y disfrutándola en sus brazos. “Estuvimos en armonía y fue un momento muy lindo”.
Lo que aparece en la serie no es precisamente lo que en realidad ocurrió, ya que según la propia Salas, Luis Miguel conoció a Michelle cuando era bebé y mientras Luis Rey todavía estaba vivo.
La actriz, además, comentó que a partir de ese primer encuentro, Luis Miguel “frecuentó regularmente a la niña durante aproximadamente tres años. Yo, personalmente, la llevaba a su casa, donde él, su abuelo Luis Rey y toda su familia la querían muchísimo, la pasaban muy bien, la consentían y la niña regresaba contentísima y llena de regalos”.
Durante sus tres primeros años de vida, Michelle contó con un padre presente, dentro de los tiempos que le permitía su profesión, aunque posteriormente, esto se interrumpió. “Era la época en que él había sacado su disco de boleros. Lo busqué, pero todo tiene un límite, y no volví a saber de él”, declaró Salas en una entrevista en 2018.
Bastante tiempo después, en 2005, Michelle Salas habló de su relación con Luis Miguel en la portada de la revista "Quién". Ella tenía 16 años y dijo: “ya no quiero que me compadezcan por ser la hija no reconocida de Luis Miguel cuando él sabe que existo”.
Pero en 2008 hubo un reencuentro entre padre e hija: la joven se mudó a vivir con su papá y con Aracely Arámbula (que entonces era su pareja) a Los Ángeles.
En aquel entonces cobró gran trascendencia de que el cantante había pasado junto a su hija un fin de semana en Disneyland. Según la revista mexicana "TV Notas" Luis Miguel y Aracely Arámbula, pasearon por el famoso parque temático junto a Michelle. Para evitar a la prensa, los tres aparecieron disfrazados: Salas de conejo, Arámbula de gata y Luis Miguel de tigre.
Aquellas fueron las primeras fotografías públicas de padre e hija juntos, ya que en ese momento Luis Miguel no había dejado transcender jamás ningún dato con respecto a ese vínculo en ningún medio.
Tiempo después, en 2011, Luis Miguel reconoció legalmente a Michelle como su hija, según reportó el programa "Escándalo TV", en donde mostraron un documento en el que aparece el nombre completo de la Michelle (que en aquel entonces tenía 22 años) como Michelle Gallego Salas.
Ese documento inmobiliario daba por sentado que la joven era la dueña de una propiedad en Quartz Hill, en Los Ángeles, California, valuada en 108 mil dólares, desde el 24 de septiembre de 2009, con lo cual Luismi le había traspasado la propiedad a su hija.
Por ahora, para conocer esta historia más de cerca (en una versión adaptada), tendremos que esperar la versión que nos tiene preparada la serie biográfica -que estrena un capítulo nuevo cada domingo a las 21, por Netflix-, teniendo en cuenta que es la historia autorizada por el propio Micky. Y hacernos la idea de que varios detalles sustanciosos quedarán guardados para siempre en la vida privada del cantante mexicano.