Richard Scott William Hutchinson pesaba menos de medio kilo cuando nació. Tuvo que salir la mundo de manera prematura, a las 21 semanas y dos días de gestación, porque su mamá, Beth Hutchinson, tuvo complicaciones de salud y se tuvo que adelantar el parto.
Nació el 5 de junio de 2020, 131 días antes de tiempo considerando que el periodo gestacional estándar es de 40 semanas. Los médicos dijeron que tenía 0% de probabilidades de sobrevivir pero lo hizo. Y se se convirtió en el bebé sobreviviente más prematuro según Récord Guinness. Superó a James Elgin, en Ottawa Canadá, con un periodo gestacional de 21 semanas y 5 días, o 128 días prematuro el 20 de mayo de 1987.
"No se siente real. Todavía estamos sorprendidos por eso. Pero estamos felices. Es una forma en que podemos compartir su historia para crear conciencia sobre los nacimientos prematuros", expresó Beth ahora que Richard acaba de cumplir su primer año de vida.
El bebé que nació en el hospital Children’s Minnesota, de Minneapolis, Minnesota, Estados Unidos, fue dado de alta en diciembre del año pasado. Beth está muy agradecida del trabajo que hicieron los médicos para que su hijo siguiera viviendo. "Son el equipo más asombroso. Nos encanta el personal que se ocupó de nuestro hijo y desearíamos poder compartirlo con ellos todo el tiempo. Cuando estuvo allí, lo llamaron el 'bebé milagroso'. Estoy de acuerdo con ellos", declaró.
En diciembre, después de seis meses en la UCI de neonatología, Beth y Rick pudieron, al fin, llevar a su pequeño a casa. Eso sí, con oxígeno y una sonda para alimentarse.
"Sabía que las primeras semanas de vida de Richard serían muy difíciles, pero sentí que, si podía superarlas, sería un superviviente", dijo conmovida su mamá.
"El día en que Richard recibió el alta de la unidad de cuidados intensivos fue un día muy especial. Recuerdo que lo levanté de la cuna y lo sostuve con lágrimas", comentó Beth. "No podía creer que fuera el mismo niño que una vez estuvo tan enfermo que temí que no sobreviviera. El mismo niño que antes cabía en la palma de mi mano, con una piel tan translúcida que podía ver cada costilla y vaso de su pequeño cuerpo. No pude evitar apretarlo y decirle lo orgullosa que estaba de él", agregó.
Y el 5 de junio pudo celebrar su primer cumpleaños rodeado de su familia y pellizcando una torta con crema que su mamá le preparó especialmente para él.