Martín Carrizo, hermano de Caramelito y ex baterista de Gustavo Cerati y el Indio Solari, desde 2017 comenzó una férrea lucha contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) que le diagnosticaron. Una cruzada solidaria encabezada por la conductora infantil ayudó a que pueda atenderse en Miami, donde están los tratamientos más avanzados. La realidad es que los costos se hicieron insostenibles, algo que provocó que tenga que regresar al país para continuar con un seguimiento alternativo.
En las últimas horas, el músico comunicó a través de sus redes sociales que tuvo que vender tres baterías con el objetivo de conseguir dinero para continuar atendiéndose. “Y se fueron mis tres naves nomás”, arrancó diciendo a través de su cuenta de Instagram. Se trata de uno de los bateristas más destacados, que logró estar al lado de los mejores artistas del país. Sin dudas, aunque el objetivo que persigue es en pos de un bien personal, la situación de desprenderse de estos objetos no deja de causarle tristeza.
“Las tuve que vender. Tengo que seguir avanzando. De cierta manera, me alegro. Tienen que seguir sonando mientras yo sigo enfocado en mi recuperación. Están en buenas manos las tres”, comentó al ver el lado positivo. El posteo generó una gran cantidad de comentarios de apoyo y acompañamiento por parte de sus seguidores.
En una visita que hizo Caramelito a Los Mammones hace unas semanas, reveló: “Él en muchas ocasiones se ocupó de pedirme perdón por lo que yo vivía a raíz de su enfermedad Y ayer le dije que no cambiaba por nada en el mundo estar al lado suyo. En Miami yo estaba ocho horas a su lado en la clínica y decía ‘flaca déjame en paz, Salí… déjame respirar un poco’. Quería estar con él. Lo que hubiera querido es que este sano, pero de no ser así, lo que le toca a él, me toca a mí’”.
