Máxima Zorreguieta es la reina mejor vestida del siglo XXI y lo demuestra cada vez que aparece en escena. De día, de noche, informal o de gala , sus looks son perfectos y llenos de estilo.
En su visita a Alemania junto al Rey Guillermo, la reina de los Países Bajos acudió a varios eventos donde el dress code era de gala y no dejó de sorprendernos. En el día de ayer la vimos con un impresionante vestido en color violeta y hoy se animó a llevar uno en color pastel.
Los Reyes de Holanda fueron invitados a asistir a un concierto en Berlín ofrecido por la Royal Concertgebouw Orchesta y allí disfrutaron mucho de la velada.
Máxima elige el color celeste y brilla con luz propia
Para esta ocasión , la monarca eligió un vestido largo strapless de encaje en color celeste con volados en cascada firmado por Valentino.
Complementó su look con accesorios plateados, unas sandalias plataformas y un súper taco de Aquazzurra y un clutch de Dior.
Las jotas aguamarinas de la reina Juliana
Esta vez, llevó el pelo suelto con raya al costado y ondas al agua que dejaban lucir a la perfección el conjunto de joyas de aguamarinas que pertenecían a la reina Juliana de Holanda, abuela de su marido, el rey Guillermo.
El collar fue creado por el joyero holandés Burnier, como regalo de cumpleaños para la entonces princesa por su 18º cumpleaños, en 1927. Lo encargó su abuela Juana a juego con el brazalete que también ha llevado Máxima. Ambas piezas incluyen diamantes engarzados que crean un estilo Art Déco, absoluta tendencia en aquel momento.
Otro detalle muy especial es el cinturón que lleva la reina para marcar su cintura, que puede parecer perteneciente al vestido o incluso una joya a parte, pero es en realidad un broche tamaño baguette que Máxima siempre rescata cuando se enfunda en este exquisito Valentino.
Éste fue otro regalo de la reina Juliana, que recibió cuando era princesa: su marido, Bernardo de Lippe-Biesterfeld se lo entregó como obsequio de bodas.