Patricia Sosa conoció a Oscar Mediavilla en 1974. Por ese entonces tenían 16 y 17 años y ya, siendo adolescentes, daban ambos sus primeros pasos en la música. "Yo tenía una banda y quería armar un coro. Entonces le dije a mi prima que tenía un grupo vocal que venga con las chicas a hacerme los coros", le contó Mediavilla a Juana Viale, en los almuerzos de Mirtha Legrand.
"¿Llegó y flasheaste o la escuchaste? Porque Patricia tiene una voz importante", le preguntó Juana. "Llegó y se sentó en mi casa y agarró mi guitarra y se puso a cantar", continuó Oscar. "¿A vos te gustó él cuando lo viste?", le preguntó Juanita a Patricia. "Sí, me encantó, pero tenía novia. Hasta me la presentó", recordó la cantante en esa misma ocasión.
"La cuestión es que Patricia se puso a cantar Penélope, y mi mamá me miró y se sonrió como diciendo 'estás jodido nene con esto'. Y entonces yo traté de acercarme, de que me diera bola", recordó Oscar. "Yo no le di bola, qué te vas a hacer el langa conmigo, ahora sos un sex symbol, antes no. Lo volví a ver seis meses después en un recital, porque a mí me había gustado, y ya sabía que ahí no tenía novia", agregó Patricia.
El productor relató que la historia de amor no comenzó inmediatamente. "No teníamos nada en común. Me acuerdo que estábamos viajando en el colectivo, en el 70, y le dije 'dado que no tenemos nada que ver, me voy a bajar', y me bajé. Después se enamoró perdidamente", contó el músico, que por esos años formó la banda Nomady Soul con Patricia como cantante.
Luego, y ya casados, en la década del 80, formaron la banda La Torre, marcando un nuevo estilo: el de las mujeres en el rock. Con esta banda grabaron seis álbumes, desde 1982 hasta 1989. En el año 1985, la Fundación Konex le otorgó a Patricia el Diploma al Mérito, como una de las cinco mejores cantantes de la historia del rock argentino. Hacia finales de los ochenta, realizaron dos giras extensas por la entonces Unión Soviética.
En 1988 nació Marta, la única hija de la pareja y a mediados de los 90, cuando la nena tenía 7 años, decidieron divorciarse. Cuando fueron a firmar la separación formal, Oscar apareció en el juzgado con un ramo de flores y le agradeció los años de amor. Ya solista y en pleno éxito, Patricia volvió a llamar a Mediavilla tres años después para reconciliarse. Comenzaron el nuevo milenio juntos, en pareja, pero viviendo en casas separadas.
Hasta que llegó la pandemia de coronavirus, cuando decidieron hacer una cuarentena en la casa de que ambos tienen en Córboba. Y lo que iba a ser una estadía de quince día se convirtió en una larga comnvivencia que no hizo más que reafirmar la relación de amor que los une.
“Estoy divorciado. Estamos preparando una boda, que la haremos algún día. Cuando nos casamos yo le propuse, no me acuerdo. Nosotros estamos juntos hace cuarenta y pico de años. No hace falta acordarse. Lo importante es que estamos juntos, nos queremos y somos una familia”, precisó Mediavilla a fines de 2020, ya hablando de un segundo casamiento. Oscar precisó además que visualiza su futuro al lado de su amor.
"Estoy muy feliz, casarme o no, salvo que me pase algo, para que le quede a ella, pero ya tenemos todo a nombre de nuestra hija (Marta)”, dijo.
