Cómo funciona la fachada del MALBA que regula la temperatura y es un hito arquitectónico en el país - Revista Para Ti
 

Cómo funciona la fachada del MALBA que regula la temperatura y es un hito arquitectónico en el país

MALBA
La fachada ventilada del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires es un ejemplo de construcción vanguardista.
Deco
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Sobre la Avenida Figueroa Alcorta al 3415, entre San Martín de Tours y Jerónimo Salguero, se encuentra el MALBA, el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires fundado en 2001 por Eduardo Costantini. El edificio es un símbolo de la arquitectura ligada al período pre 2000: blanco, robusto, geométrico y se impone sobre el resto de las construcciones de la zona por su fachada, construida con un sistema ventilado por Calello, la histórica fábrica de mármol con sede en Lanús.

Entre otras cuestiones relacionadas al arte y a las piezas que tienen lugar en el museo, el MALBA se distingue por su fachada ventilada, que está integrada por piezas de 4 cm de espesor de Piedra Jura Beige, una caliza que se extrae en el sur de Alemania. La dureza y resistencia a los agentes externos hacen de la Jura Beige uno de los materiales naturales más apreciados para aplicar en las fachadas ventiladas.

Cada pieza que integra la fachada está sostenida por un novedoso y moderno (sobre todo para la época en que se construyó el MALBA) sistema de anclajes metálicos diseñados y fabricados especialmente en Italia, supervisado por la empresa Calello Hnos, la firma de mármoles y granitos, pionera y especializada en fachadas ventiladas .

Durante una entrevista con Para Ti, Ana Inés Calello, arquitecta de la familia, explicó cómo fue el proceso de creación: “La del MALBA es una fachada ventilada de piedra. Consiste en una fachada que está separada del paramento, del muro. Y está colgada. Entonces genera una cámara de aire que hace que el edificio tenga más eficiencia energética, como también una aislación térmica. Es como si fuera una doble piel”. 

La obra fue planificada e implementada junto al estudio de arquitectura que proyectó el MALBA , compuesta por los arquitectos cordobeses Gaston Atelman, Martín Fourcade y Alfredo Tapia, ganadores del concurso internacional organizado por la Fundación Costantini.

La metodología de construcción resultaba original y poco vista en aquel entonces, pero Calello ya venía trabajando con el sistema desde obras anteriores. A esa construcción le siguieron otras con el mismo modelo de fachada ventilada, que además de resultar favorecedora ante cuestiones climatológicas ofrece una serie de aspectos positivos, entre los que se destaca la durabilidad del material.

El edificio de MAPFRE en Puerto Madero con sistema de fachada ventilada.

Beneficios del sistema de fachada ventilada

  • Regula la temperatura
  • Reduce el acúmulo de humedad en el espacio donde se coloque la fachada
  • Gracias a la doble piel del edificio, se logra una mejor salubridad
  • Tanto en viviendas como en oficinas ayuda a disminuir los gastos de aire acondicionado y calefacción
  • Genera un ahorro de energía
  • Velocidad en los tiempos de ejecución
  • Bajo mantenimiento

Pero uno de los principales beneficios de este sistema es la seguridad que le ofrece a los peatones: asegura que las piezas que forman la fachada no se moverán o desprenderán, garantizando la seguridad de quienes se encuentran en sus alrededores, sobre todo en zonas sensibles a los movimientos sísmicos.

La posibilidad de regular la temperatura es uno de los grandes beneficios de este tipo de construcción.

La fórmula de fachada ventilada es uno de los sistemas elegidos por las grandes compañías, ya que ayuda a reducir los costos y a crear un ambiente vanguardista de trabajo. Según explican desde Calello, el producto necesita un mantenimiento mínimo (no mucho más que lo básico al estar expuesto) ya que conserva su color con el paso del tiempo y no presenta debilidades ante agentes externos, como podrían ser los factores climáticos. 

Actualmente, junto a Laminam se encuentran construyendo un edificio de viviendas con el mismo sistema de fachada ventilada, que estará ubicado en las inmediaciones del museo de Costantini. "En cualquier obra se puede implementar este tipo de fachada. Siempre que esté previsto se puede hacer en cualquier lado. En general, es más lo que se hace de edificios grandes, en casas tal vez hay alguna pared colgada", expresa Ana.

A medida que se va conociendo más sobre el producto se populariza su uso doméstico. Uno de los últimos antecedentes en obras a gran escala fue en el Aeropuerto Ministro Pistarini (obra que se planea retomar este año) cuando comenzaron con la colocación de Laminam en varias superficies del espacio.

La planta industrial de Calello fue fundada en 1933 y, hasta el día de hoy,  es la única planta en la Argentina donde se realizan todos los procesos de transformación de las rocas de aplicación. Tienen el taller de marmolería más moderno y especializado del mercado. Conocé más en el sitio oficial de Calello / @calellonet

Más información en parati.com.ar

 

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