Tres meses después la princesa Charlene de Mónaco pudo reencontrarse con su familia. Su marido, el príncipe Alberto y los hijos de la pareja, Jacques y Gabrielle, viajaron a Johannesburgo hace pocos días, para acompañar la princesa en su recuperación, tras la segunda operación a la que fue sometida. Charlene padeció una infección de nariz, garganta y oídos, enfermedad que le impidió regresar a Mónaco desde el mes de mayo.
La princesa había viajado a su país natal, ella es sudafricana, para asistir a un acto oficial con la idea de regresar a Mónaco en pocos días. Sin embargo, dolores fuertes le impidieron tomarse un avión y, desde ese momento, comenzó un largo devenir acerca de su salud.
Se dijo que la infección comenzó con un implante dental realizado en el principado antes de viajar. Pero también se habló de distancia entre la pareja y hasta hubo rumores de divorcio.
Sin embargo, la familia se volvió a reunir y ambos subieron a sus cuentas de Instagram hermosas postales donde se lo ve muy unidos.
"¡Gabriella decidió cortarse el pelo!", escribió Charlene al lado de una foto, donde la niña luce su nuevo flequillo. "Lo siento mi Bella, hice todo lo posible para arreglarlo", agregó la princesa, que evidentemente tuvo que poner manos a la obra para solucionar el corte de su hija, que decidió cortarse el flequillo sin ayuda.
