Existen varias (y llamativas) historias de algunos personajes famosos que dejaron sin herencia a sus descendientes y, en los últimos días, se conoció la decisión del actor Daniel Craig de sumarse a este grupo.
Sus hijas, según trascendió, no recibirán ni un centavo de su fortuna de más de 145 millones de euros, según contó a la revista Saga recientemente. El actor manifestó que la idea de heredar le parecía "de mal gusto" y que en su lugar tiene la intención de entregarse a un estilo de vida digno de su alter ego -James Bond- y donar el dinero a organizaciones benéficas.
Hay un caso un tanto más extremo y enigmático, el de la mujer de John Bingham (Lord Lucan), quien hizo desaparecer la herencia de sus hijos aún más rápido de lo que desapareció su marido, que no volvió a ser visto tras el asesinato de su niñera. Un testamento reveló que Verónica (la condesa viuda de Lucan, que falleció a causa de un cóctel de drogas y alcohol) se negó a dejar en herencia su patrimonio de más de 670.000 euros a sus hijos George, Camilla (consejera de la reina) y Frances.
En su lugar se lo donó íntegramente a Shelter, una organización benéfica para personas sin hogar. La solitaria condesa, que llevaba mucho tiempo distanciada de su familia, afirmó lo siguiente en el documento: “En vista de la falta de buenos modales y reverencia hacia mí en tanto que su madre, no deseo que ninguno de mis tres hijos se beneficien de mi muerte más allá de lo estrictamente necesario”.
Otra de estas historias es la de Colin Tennant (Lord Glenconner), quien falleció de manera repentina debido a un ataque al corazón en 2010. Lady Anne Tennant, su esposa durante 54 años, supo que había sido despojada de su herencia familiar de más de 25 millones de euros, ya que se los había dejado a Kent, su ayudante de cámara, a quien había conocido en una playa de Santa Lucía.
Una “terrible humillación… y encima hacérselo a nuestros hijos”, dijo Lady Anne, dama de compañía de la princesa Margarita de Inglaterra, refiriéndose al doloroso y espectacular “ardid horrendo” por parte del Tennant.
La pareja había tenido tres hijos y dos gemelas: Henry murió a causa del SIDA en 1990 y su hermano Charlie seis años después de hepatitis C. El tercero, Christopher, sufrió daños cerebrales tras un terrible accidente de moto y recuperó la salud gracias a los cuidados de su madre. El hijo de Charlie y heredero de la baronía, Cody, consiguió recuperar la mitad del patrimonio tras siete amargos años de batalla legal.
El conocido chef Gordon Ramsay, con varias estrellas Michelin en su haber, tiene un estilo de vida capaz de seguirle el ritmo a sus mejores amigos, los Beckham. Pero, curiosamente, juró que sus cinco hijos tendrán que ingeniárselas para ganarse la vida y no depender de él. Según declaró a The Telegraph, no dejaría ni un solo centavo de su dinero a sus cinco hijos una vez falleciese. “Sin duda no irá a parar a ellos, y no es por maldad, sino para no malcriarlos”, explicó.
Simon Cowell es famoso por haber regalado millones de libras en contratos de grabación a completos desconocidos en el programa Factor X. Sin embargo, el directivo (y jurado televisivo) afirma que su fallecimiento no le abrirá todas las puertas a su hijo Eric. El multimillonario y magnate de los medios de comunicación, que ha sido artífice de su propio éxito, ha insistido en que no cubrirá de por vida las espaldas de Eric gracias a recibir una herencia jugosa. En lugar de eso, se la dejará “probablemente a alguna organización benéfica; algo con niños y perros. No creo en legar la herencia de una generación a otra”.
