Uno de las últimos hallazgos del skincare tiene que ver con el conjunto de microorganismos que habitan en nuestra piel, formando una barrera protectora que evita que se inflame, se agriete o que le penetren otros microorganismos nocivos.
Sobre este y otros temas relacionados con la piel -y con varios productos que la industria desarrolló a lo largo de la historia para su "cuidado"- es el capítulo La Piel de la serie En pocas palabras, de Netflix. El documental hace un repaso por las diferentes concepciones con las que se consideraba lo que era "cuidar la piel", desde comenzar a lavarla con agua, pasando por el "reinado" del jabón y la mega industria cosmética que sobrevino después (y, a su vez, cómo fue creciendo y mutando).
La cuestión es que el punto más interesante tiene que ver con cuál es hoy, después de tantos años de investigación, la manera más apropiada de cuidar el "órgano más grande del cuerpo humano", concluyendo que después del protector solar, es la limpieza pero no cualquier tipo, sino aquella que no atenta en contra de la macrobiota que la habita.
"Más allá de la elección del tipo de limpiador (en espuma, leche de limpieza, jabón syndet, sin sulfatos) lo más importante es el pH. Manteniendo el pH de la piel equilibrado cuidamos el manto hidrolipídico, evitamos irritación, resequedad y mantenemos la microbiota equilibrada".
De este importante punto también se hizo eco la skinfluencer Verónica Frágola, mejor conocida como Fruticienta, quien se preguntó: "Y ¿cómo mantenemos equilibrado el pH de la piel? Con un limpiador que tenga un pH que oscile entre 5 y 5,5. Lamentablemente las marcas no informan el pH, podemos medirlo en casa con algunas cintas especiales o con un medidor". Ella se tomó el trabajo de hacer las mediciones y de publicar una lista con los limpiadores del mercado que cumplen con esta premisa. "Estos tienen un ph balanceado. Lo que no quiere decir que si están usando otro tengan que tirarlo".
Luego remarcó la importancia de la consulta profesional, en la que es fundamental la adecuación de las recomendaciones según cada tipo de piel: "Si su dermatólogx les recetó otro, es porque es el indicado para su piel. Lo mismo para pieles con acné, rosácea o sensibles: la única palabra que vale es la del especialista. Pero si notan que el jabón les reseca mucho, pueden probar con estas opciones", observó.
