Donato de Santis terminó ratificando una famosa frase que siempre que escucha y que está relacionada a que la actividad deportiva aleja a los niños de las malas influencias. El reconocido chef estuvo invitado a “PH, Podemos Hablar” y recordó algunos aspectos de su infancia y cómo, con dolor, tuvo que despedir a todos sus amigos del sur de Milán.
“Yo creo que a mi me salvó el béisbol. Empecé a jugar, a hacer entrenamiento y tener una actividad física de chiquito”, comenzó a relatar en el ciclo de Telefe. Simultáneamente, en esa época, gran parte de sus amigos arrancaba a meterse en una rueda de vicios y delincuencia de la que, por suerte, pudo escapar.
“Yo tenía diez años y gran parte de mis amigos se desparramaron por cualquier lado fumando, robando motos, vendiendo falopa y haciendo cosas clandestinas. Empezaron a darse con todo”, reveló el ex jurado de “MasterChef Celebrity”.
Y agregó: “Aprendí de eso de rebote. No voy a decir que no toque nada, pero... Se murieron todos: sida, suicidios, accidentes, asesinados por arreglos de cuentas. Entre los ochenta y noventa se murieron todos”.