Ana Belén Beas se define como una “artista”. La palabra puede sonar simple, pero el concepto que engloba es sumamente integral y ella lo representa en cada uno de los desafíos profesionales que ha encabezado a lo largo de su extensa carrera dentro del mundo del espectáculo. Nacida en Lorca, España, ha logrado grandes éxitos tanto en su país como en estas tierras. “El escenario sin duda es mi casa. Amo pisar escenarios de diferentes países. Me hace crecer no solo artísticamente, sino como persona. Me hace vivir vidas apasionantes”, refleja en una entrevista exclusiva con Para Ti.
Uno de sus trabajos más icónicos fue el personaje que interpretó en “Luz Cenicienta”, la obra que integró junto a Moria Casan y Maximiliano Guerra en 2017. También se dio otro lujo: fue parte de la emblemática “Parque Lezama” de la mano de Juan José Campanella junto a Luis Brandoni.
Si bien es una figura que está vinculada a la escena teatral, se puede decir que tendrá un debut de primera en la industria del cine: el año pasado rodó “Competencia Final”, la película de Gastón Duprat y Mariano Cohn con los protagónicos de Antonio Banderas, Penélope Cruz y Oscar Martínez. Y, si le faltaba una para profesional a esta historia, la está construyendo en este mismo momento al filmar “Privier”, su primera serie para una conocida plataforma de streaming. Alberto Ajaka, Viviana Saccone, Mónica Antonópulos y Claudio Tolcachir son algunos de los actores que formarán parte de la pieza.
-¿Como tomó tu familia que te quieras dedicar al mudo artístico?
-Mi familia siempre intuyó que me dedicaría al mundo artístico. Según me cuentan, en casa bailaba y canturreaba incluso antes de hablar… La primera vez que actué en un escenario fue con apenas tres años, así que, ellos ya tenían claro que mi lugar iba a estar ahí. ¡Y así fue! Les agradezco mucho, a mis padres y mi hermano, que vieran esta pasión en mi cuando era tan pequeña, y me guiaran en esos primeros años de vida poniéndome en el camino que me llevaría a ser tan feliz viviendo de lo que amo.
-¿Como fue tu primera vez en argentina?
-Fue un sueño. Vine con un proyecto muy personal: “Luz Cenicienta”. Estrené en el Teatro El Nacional, con un equipo creativo de primer nivel, y compartiendo escenario con artistas emblemáticos del panorama nacional como Moria Casán, Maximiliano Guerra y un elenco de artistas del musical de Argentina de primer nivel. Siempre estaré agradecida al recibimiento del público argentino.
-El público te recibió muy bien…
-Lo hicieron de una manera increíble, así como la prensa y mis colegas artistas. Miro hacia atrás y siempre sonrío cuando recuerdo esa etapa tan mágica. Desembarcar en un país que no es el tuyo, con una súperproducción así y ser recibida con tanto cariño. Es difícil de olvidar. Guardo grandes amigos de esa época.
-Se puede decir que te diste el gusto de trabajar con figuras de máxima relevancia en la escena nacional, ¿que te dejaron profesionalmente?
-De Moria aprendí de su generosidad, de su profesionalidad, de llegar la primera a los ensayos con el texto totalmente aprendido, e irse la última, estando siempre abierta a cualquier pauta que le diga el director y que sea buena para el personaje y el proyecto. De Luis Brandoni y de Juan José Campanella, también aprendí el no conformarse nunca. El pensar que siempre se puede mejorar un poco más una escena. Nunca acomodarse, si no trabajar en los detalles sutiles para mejorar aún más un personaje. De José María Muscari, la importancia de saber cuál es la esencia de uno y potenciarla. Y así podría seguir contándote de cada uno de mis compañeros de escena, de series, directores, técnicos, vestuaristas, creativos, productores… Porque de cada uno de ellos, aprendes tanto lo que se debe hacer como lo que no.
-¿Como viviste la cuarentena por el coronavirus y el impacto que generó en tu rubro?
La cuarentena la viví como todo el mundo, como pude. Con días creativos, días llenos de miedo e incertidumbre, días esperanzados y activos y otros no tanto. En lo que respecta a nuestra profesión, sufrió mucho. Se pararon las producciones, se cerraron teatros… Pero la pandemia dejó muy claro, una vez más, que el arte y el entretenimiento es una primera necesidad para el ser humano. Los artistas nos volcamos en esos meses de encierro a las redes para entretener y tratar de hacer más llevadera una etapa tan desoladora y solitaria vacía de abrazos.
-Ahora la actividad está resurgiendo y estás con un nuevo proyecto, ¿de que se trata “Privier”?
-"Privier" es una mini serie de seis episodios de producción argentina para una conocida plataforma. Es una ficción fantástica de ciencia ficción, un género difícil de hacer y poco común en Argentina. Está dirigida por Nico Tuozzo, y tiene una temática interesantísima: El alma, ¿es inmortal? ¿Ha vivido otras vidas antes de la actual? ¿Qué estarías dispuesto a hacer para demostrar que el alma es inmortal? El rodaje está siendo en Buenos Aires, Mendoza, Mar del Plata, Entre Ríos, Colonia, y Egipto. Una gran producción y con un gran trabajo de efectos especiales. Estoy segura que va a sorprender mucho cuando esté terminada.
-¿Se puede adelantar algunos nombres del elenco?
-El protagonista es Alberto Ajaka. También están en la serie Mónica Antonópulos, Viviana Saccone y Claudio Tolcachir, entre otros. ¡Es un elencazo! ¡Todos ellos son geniales! Hacen unos personajes muy interesantes. Va a ser una serie que va a dar mucho que hablar. La temática es muy atractiva, el elenco es de lujo y la producción de primer nivel.
-¿Con que versión de Ana Belén Beas se va a encontrar la gente?
-Mi personaje es Paula. Una española que vive en Brasil. Una chica positiva, fresca, optimista que queda cautivada por la historia de Privier. Le va a aportar un poco de optimismo y fuerza para resolver el conflicto en un momento en el que Privier (Ajaka) y Miranda (Antonópulos) sienten que no lo van a lograr…Me ha encantado hacer este personaje. Fue todo un reto prepararlo, porque tengo que hablar en español y en portugués. ¡Y me ha encantado la experiencia! Todas mis escenas son con Mónica y Alberto y ha sido fantástico conocerlos y trabajar juntos. Hubo muy buena conexión desde el primer momento. Además de ser dos actores fantásticos, son dos personas excelentes.
Un nuevo rumbo para su carrera
-¿Puede ser que estás más encasillada con el mundo del teatro? ¿Cómo te sentiste en una producción audiovisual?
-En Los Ángeles ya había trabajado en audiovisual para Telemundo y Azteca America. Pero reconozco que soy bicho de teatro. La adrenalina que tiene el escenario, el saber que cada noche es distinta, la emoción del vivo, sentir al público cerca… todo eso me fascina. Este año tuve ya una experiencia participando en la película con Antonio Banderas y Penélope Cruz y ahora esta serie. Tengo que reconocer, que también me está atrayendo bastante el mundo audiovisual. Así que, no descarto seguir con otros proyectos de cine y TV. Aunque será a partir de mayo de 2022, porque hasta entonces tengo compromisos de teatro: el Estreno de “Fama, El Musical” en el Teatro Apolo de Barcelona y El Principio de Arquímedes en el Teatro Quique San Francisco en Madrid.
-Con Miguel, tu pareja, los une el amor y el trabajo por la productora “El Tío Caracoles”. La gran pregunta es, ¿por qué seguir apostando entre tanta adversidad?
-Mi respuesta es siempre la misma: ¿Y por qué no? ¿Cuándo es el momento de abandonar tu pasión? NUNCA. Esa es nuestra filosofía. El arte, el teatro, crear proyectos y darles vida, es nuestra pasión. Es precioso compartir pasión con tu compañero de vida. Disfrutamos mucho de todo el proceso. Él es el productor y yo lo asesoro desde lo artístico en algunos de sus proyectos. Al igual que cuando yo estoy actuando, me gusta recibir sus consejos y saber que está ahí cubriéndome las espaldas y con una visión desde afuera. Hemos armado un buen equipo, nos complementamos bastante bien y sobre todo, disfrutamos mucho el día a día.
-¿Que diferencias encontrás a la hora de trabajar en España y en Argentina?
-El mundo artístico es muy parecido en cualquier parte del mundo. Las diferencias las marcan más las economías o la estabilidad de cada país. Pero en el resto, hablamos el mismo idioma. Cada proyecto es como una orquesta: si cada uno respeta el trabajo del otro y se dedica a hacer bien su parte, se crea la magia y todo fluye, no importa el idioma ni el lugar donde estés. Luego hay pequeños matices también por la idiosincrasia. Por ejemplo, el público argentino es quizás un poco más efervescente que el español, expresa más, te espera a la salida del teatro…
-¿Que sigue después de “Privier”?
-Lo más inmediato es el estreno de Fama el 19 de octubre. Después me han hecho una oferta para temporada de verano en Carlos Paz. Una propuesta muy tentadora, pero que no puedo confirmar hasta tener una reunión en Madrid por otra obra que ya me habían ofrecido. Tomaré la decisión una vez tenidas las dos reuniones. Y después el estreno de “El Principio de Arquímedes” en abril, dirigida por Josep María Miró. Una obra súper reconocida internacionalmente, traducida a 20 idiomas y representada en 40 países, nada más ni nada menos. Tengo muchas ganas de empezar a trabajar en mi personaje, porque es uno de esos personajes que es muy diferente a mi, y que supone un reto toda su creación.
Fotos: Alejandro Carra
Peinado y Make up: Cristian Rey Style
Ropa: Silvina Falcón
Prensa: Maxi Cardaci
