En plena pandemia hubo varios datos alarmantes en torno a la salud, que también implicaron la realización de controles y chequeos ginecológicos, que disminuyeron de manera drástica.
"Durante 2020, especialmente en los primeros meses del confinamiento estricto dispuesto para la no propagación del COVID, las consultas y los chequeos ginecológicos de rutina bajaron drásticamente con respecto a 2019, a razón de un 60 % menos” afirma la Dra. María Laura Martinez, especialista en Ginecología de DIM Centros de Salud (MN: 98033 / MP: 225443)
En este sentido, es clave destacar que la detección temprana es la clave fundamental para poder lograr éxito en el tratamiento y por eso es tan necesario el chequeo anual de las mamas, apunta la especialista.
Por eso es de suma importancia que además de sumar cada día hábitos saludables, "realizar la mamografía anual y el examen por el médico especialista es la mejor manera de detectar de manera precoz la patología, disfrutando de una vida plena y minimizando riesgos".
Entre las principales señales de alerta que se deben tener en cuenta, figuran:
- Detección de un bulto o nódulo en la mama, que sería el tumor o malformación celular.
- Aumento en los ganglios linfáticos muy cerca de la axila.
- Cambios físicos en la mama, como por ejemplo color, tamaño o textura.
- Enrojecimiento de la piel, sobre todo cerca de la aureola del pezón.
- Formación de depresión o arrugas en la piel.
- Secreciones por el pezón.
- Descamación del seno.
- Dolores o molestias en el seno, parecidos al de una mastitis.
- Pérdida de peso.
- Hinchazón en los brazos (Este es un síntoma infalible para detectar que el tumor es cancerígeno).
Además, para completar el cuadro de cuidados "se recomienda realizar un chequeo anual femenino, incluso desde la adolescencia, para la detección de posibles patologías asociadas".
Los exámenes que debería incluir un buen chequeo anual femenino son:
- Chequeo ginecológico anual: Pueden realizarlo todas las mujeres a cualquier edad con apertura de historia clínica y examen físico.
- Control citológico cervical (Papanicolau y Colposcopía): Son los exámenes que permiten detectar a tiempo lesiones o células premalignas o malignas que deriven en la aparición de cáncer de cuello uterino.
- Ecografía Mamaria: Es un examen sencillo para examinar las mamas, que se realiza utilizando un ecógrafo, que utiliza ondas sonoras.
- Ecografía ginecológica y/o transvaginal: es una técnica de exploración no invasiva que, mediante ultrasonidos permite visualizar los genitales internos de la mujer. DIM mujer posee la gama Premium de Philips en ecografía
- Mamografía: Es una exploración diagnóstica de las mamas que utiliza rayos x en baja dosis para detectar en forma temprana el cáncer cuando es más tratable.
Otros estudios posibles, a pedido específico del profesional en casos puntuales:
- Densitometría: es un examen indoloro para detectar un posible déficit de calcio en los huesos, está indicado para el diagnóstico de la osteoporosis.
- Punciones mamarias: Consiste en la obtención de pequeños fragmentos de tejido mamario, para detectar lesiones que no son posibles diagnosticar mediante métodos convencionales, se realiza mediante una aguja especial.