El microbob de Hailey Baldwin, el long bob de Selena Gomez, el sci-fi bob de Bella Hadid, el de Kaia Gerber, Kylie Jenner y en algún momento, Zendaya impusieron sus propias versiones del bob, el corte más versátil y amado por todas.
Recientemente fue Naomi Watts quien lució su propio estilo de este corte, con motivo de la presentación de su último trabajo, Infinite Storm. La actriz australiana, de 53 años, llevó una melena híper lacia con raya en medio, en un papercut bob.
Su blusa blanca, coronada por un detalle floral XXL requería un peinado discreto para contrarrestar y su elección fue la mejor posible. Por eso, si tenés el pelo fino y ya pasaste la barrera de los 50, podés verte espléndida con este corte, una opción elegante y súper fresca.
Para lucir de verdad su pelo, el look de Naomi tiene varias claves: una textura visual con mechas en varios tonos de rubio ceniza (coloración que será tendencia esta temporada), el alto nivel de hidratación que le permite lucirlo su pelo brillante y la ausencia de flequillo que hace que el look final sea más sofisticado. Lo bueno de este corte es que también es muy sentador cuando se lo deja al natural, como ella lo muestra en sus redes: le confiere un aire juvenil y desestructurado.
Lucy Boynton, quien se hizo mundialmente conocida al trabajar en Bohemian Rhapsody, se pasó a un corte bob que hoy es casi una marga registrada. En sus últimas apariciones ha cambiado las habituales ondas por un acabado pulido y sofisticado, como lo lució para la ceremonia de la British Academy Film Awards un par de semanas atrás.
La estrella de Euphoria, Hunter Schafer, adoptó este bob retro-futurusta. Y por sus recurrentes cambios de look podemos decir que tiene una relación amor-odio con su flequillo: pasa de llevarlo recto y muy corto a quitarlo por completo de sus peinados. Por lo general, sus looks son con pelo lacio y recto, en ocasiones desmechado e incluso en capas.
La melena de Maya Hawke (hija de Uma Thurman y de Ethan Hawke, protagonista de Stranger Things) se ha convertido rápidamente en un ícono de las nuevas generaciones, y su marcada imagen tiene mucho que ver. Ya lucido el bob en múltiples versiones, aunque quizá la más sorprendente sea esta que lució durante la semana de la moda de París: con un tono más claro que el habitual y algo más largo, dejó sus ondas al natural y sumó un flequillo extralargo, que le aportaba un desenfadado estilo grunge.
