Las plantas siguen presentes en la decoración de interiores y cada vez son más las personas que se animan a sumarlas.
Si bien la lista de las especies de moda es muy amplia y variada, no hay dudas de que las palmeras de interior son unas de las más buscadas gracias a su frescura, poder decorativo y escasos cuidados.
Y así como la Areca y la Kentia son algunas de las palmeras favoritas, esta temporada también se suma a la lista la bellísima Chamaedorea elegans.
Nativa de México, Guatemala y Belice, es conocida popularmente como 'palmera de salón' y su cultivo puede hacerse tanto en interiores como en exteriores.
Su crecimiento es lento y puede alcanzar hasta 2 metros de altura.
Al tratarse de una palmera dioica -sus flores son unisexuales y se encuentran en ejemplares separados- se recomienda plantar varias juntas para darle un aspecto más robusto y cargado.
Cómo cuidar la Chamaedorea elegans
- Luz y ubicación: prefiere un espacio amplio y con una buena iluminación natural evitando los rayos directos del sol, las corrientes de aire y las zonas de alto tránsito, ya que el roce podría dañar fácilmente sus hojas.
- Temperatura: si bien soporta muy bien la humedad y las temperaturas más cálidas, se recomienda tener un especial cuidado con aquellas inferiores a 10 °C ya que podría no resistirlas,
- Riegos: deben ser moderados evitando los encharcamientos. En verano se recomienda hacerlo unas cuatro veces a la semana e ir reduciendo la frecuencia en invierno.
- Sustrato: prefiere uno liviano y con un buen drenaje. Se recomienda utilizar perlita (30%).
- Fertilizante: se recomienda apostar por un abono específico para palmeras y colocarlo cada quince días, desde principios de primavera hasta finales de verano.