El french balayage es una técnica de coloración que permite personalizar las mechas y armarlas de acuerdo al efecto que se quiere lograr.
La idea principal de esta técnica, es que queden mechas que se fundan de manera natural con el color de base del cabello y que se integren orgánicamente para una terminación luminosa y brillante en la melena (y también en el rostro).
Otra de sus ventajas es que solamente requiere de ciertos retoques cada tanto, reduciendo la dependencia de ir al salón y también evitando exponer tan seguido el pelo a los químicos de las tinturas.