Este viernes Valeria Mazza realizó una producción con Para Ti, en el marco del festejo por los 100 años de la publicación y allí habló de cómo la afectó el ataque sufrido por Tiziano, su hijo de 20 años, que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente dos veces por una fractura de mandíbula y hace pocas horas fue dado de alta después de la segunda cirugía.
"Ahora estoy mejor, pero lloré mucho, me enojé mucho", comenzó dicendo la modelo y empresaria. "Por otra parte, sigo enfocada en mi rol de madre, tratando de acompañar y de tomar las mejores decisiones posibles con Alejandro (Gravier) sobre la recuperación médica de Tiziano, y acompañando además a mis otros hijos (Balthazar, Benicio y Taína), tratando de hacer que esto sea un momento feo, pero además enseñándole a los chicos a afrontar estas situaciones juntos", agregó.
La empresaria volvió a poner el énfasis en el impacto emocional que significó ver a su hijo accidentado luego del ataque. "El primer día no lloré, apenas nos llamaron. Estaba muy enfocada en qué había que hacer. Pero al día siguiente, ya sabiendo que había que operar y sabiendo que Tiziano estaba estable medicinalmente hasta que entrara en cirugía, ese día no podía parar de llorar", expresó con angustia.
"Pensando en lo que podría haber sido, en el por qué de esta agresión, esta violencia. Lloré mucho y me sigue pasando porque no tolero la violencia y la injusticia, no puedo entender cómo los seres humanos podemos lastimar al otro, o cómo te puede importar tan poco el otro...", expresó.
"La gente nos decía pero cómo no se enojaron, y tenés que contener a esa gente que reacciona con violencia y yo no puedo reaccionar de esa manera, sería incapaz de hacerlo, al contrario digo cómo puede ser que un ser humano pueda disfrutar con el sufrimiento del otro... no lo entiendo", dijo.
Luego, la empresaria explicó cómo intentó convertir este suceso verdaderamente negativo en una enseñanza de vida. "Se habla en familia, se busca la manera de seguir adelante positivamente y buscando aprender de ésto, no quedándose maldiciendo todo el tiempo, sino deciendo bueno me tocó, lo atravieso, de qué manera lo atravieso mejor, y aprender y ver de que manera puedo colaborar, porque esto nos trascendió como familia, así que pensando de qué manera puedo colaborar para que estas cosas dejen de pasar", explicó.
