Decorar estantes y bibliotecas siempre es una buena idea: son tan estéticos que si ponemos cualquier detalle, por más mínimo que sea en tonos más claros, resaltan muchísimo y pueden convertirse en los protagonistas del ambiente (sobre todo si son de madera).
Pero para lograr un resultado estético y armónico, el primer paso es vaciar la estantería o biblioteca para visualizar cada objeto y así descartar todo lo que ya no nos identifica y no queremos volver a colocar. Una vez realizado, ya estamos listos para comenzar con el proceso de decoración.
5 tips para decorar bibliotecas y estantes
Velas... Siempre velas.
Encajan perfectamente en cualquier espacio -sean bibliotecas de livings o baños- desprenden exquisitos aroma y aportan un plus de calidez único. En el mercado actual podés encontrar una amplia variedad en materia de colores, formas y fragancias.
Pero antes de salir en búsqueda de la vela ideal, conviene contemplar qué espacio queremos decorar y luego de eso optamos por la mejor opción.
Jarrones con o sin flores
Son tendencia de decoración en los tiempos que corren. Podés sumarle flores, ramas verdes o simplemente colocarlos solos. Los jarrones rústicos, en tonos cálidos que se inspiran en la naturaleza, son una de las opciones favoritas de la temporada y quedan divinos.
Libros
Podemos jugar en los estantes, colocarlos de forma vertical y en otro lado hacerlo de manera horizontal apilados -no más de ¾ logrando un equilibrio visual, si de un lado colocamos un elemento vamos a poner del otro alguno que lo compense-.
Menos es más siempre: tener orden genera paz visual y armonía en los espacios. Los objetos siempre se ven mejor apilados en grupos de 3.
Objetos impares
Macetas vacías también son un gran recurso a la hora de decorar y dan mucho protagonismo en las bibliotecas. La mirada siempre va primero a la parte central así que si quieren que el punto focal sea algún objeto en especial, deben ubicarlo en ese espacio.
Repetición de objetos
Repitamos objetos decorativos en distintas esquinas de los estantes para que visualmente no resulte pesado -obviamente todo está sujeto a los espacios que tengamos para cubrir-. Podemos elegir algún elemento que nos guste mucho, como una planta pequeña o un cuadro familiar que podemos repetir sin que genere invasión visual.
Fuente: Natalia Verónica Olivera, Lic. en Comunicación Social y creadora de @deco.bynat.