Flor Otero y Germán Tripel se conocieron hace doce años cuando trabajaban juntos en la obra de teatro “Rent”. Y hay que destacar que esta historia de amor no es de esas idílicas en donde un flechazo los marcó para toda la vida. Se casaron, tuvieron una hija... pero acá, en los inicios del romance, no había tanta onda.
“Ninguno de los dos había quedado como titulares pero luego se bajaron las dos personas que iban hacer nuestros papeles, por lo cual, entramos a la obra por cosa del destino", le contó la actriz a GENTE hace unas semanas.
En la nota habló de los prejuicios que tenía debido a que él no era actor. “Al menos pensé que no lo era y decía: 'que garrón que pongan a alguien por el simple hecho de que era conocido', entonces yo tenía eso en la cabeza, de que Germán estaba ahí por ser conocido, ocupando el lugar de alguien más preparado", dijo.
Los ensayos fueron la oportunidad de conocerse y comenzar a gestar un vínculo. Pero muy de a poco. “Al principio no había mucha onda, nos costaba encontrar este vínculo de pareja que tenían nuestros personajes y el resto del elenco sí, por lo que, el director junto al Negro Carrizo nos empezaron hacer ensayos apartes y fue ahí donde empezamos a conocernos mucho más", reveló.
El punto de coincidencia entre Flor Otero y Germán Tripel
Las desventuras amorosas que estaban pasando fueron el punto que los hizo empezar a hablar de temas más profundos. "Decíamos: 'que lindo sería poder encontrar en alguien tal cosa y esto (...)', y el otro diciendo lo mismo: 'Sí, tal cual (...), a mí me pasa lo mismo', y bueno después yo me separé un día de los enamorados y al tiempito Germán. Luego, al mes y pico ya estábamos empezando a salir", detalló.
La anécdota de Flor Otero con Germán Tripel
En esa nota de GENTE, ella contó que las primeras salidas consistían en caminar por Recoleta e ir a un bar que tenía muchos números de nombre.
"No sé por qué, pero nos gustaba quemarnos con una vela en la mano, entonces era ver quién aguantaba más con la cera caliente en la mano. Una estupidez, no sé porque recuerdo esta anécdota", confesó.