Son momentos decisivos para la familia Vicuña, que acompaña a Juan Pablo, padre de Benjamín Vicuña, en su delicado estado de salud. Durante su paso por el programa radial "Perros de la calle", conducido por Andy Kusnetzoff, el actor recordó su infancia y adolescencia, algo que resultó complicado debido a los constantes "choques" que tenía con su progenitor.
"No me hablé con mi viejo por dos años. Quería que fuera cualquier cosa menos actor", se sinceró Vicuña, cuando recordó su ingreso como becario a la Universidad de Chile para estudiar Licenciatura en Artes. Pero esto no fue todo, ya que anteriormente, el actor se había cambiado de equipo de fútbol.
El fútbol, la gran pasión que separó a Vicuña de su papá
"Tuve otro cambio dramático. Heredé un club de fútbol que no era el mío, la Universidad Católica, y era el segundón, una especia de karma. Entonces me pasó una cosa maravillosa cuando Colo Colo salió ganador de la Copa Libertadores contra Club Atlético Boca Juniors (1991). Ahí, hace 30 años me cambié de equipo", aseguró.
Esto empeoró la relación con su padre, ya que él le había asignado su equipo futbolero cuando era tan sólo un niño. "Esto fue antes de que me dejara de hablar. Hice todo para llamar la atención", bromeó Vicuña, para aliviar el clima tenso. Allí, se refirió a su papá como alguien práctico y que lo ayudaba desde otras perspectivas, por lo cual, agradece mucho eso de él.
"Mi viejo era empresario, muy inteligente y yo encontré un vínculo con él, desde la razón y no tanto desde lo afectivo. Yo tuve una formación humanística, desde los libros y no me encontraba desde ese punto con él. No tuve un papá filósofo sino a alguien práctico", subrayó Benjamín, quien viaja cada semana para acompañarlo, dejando de lado sus diferencias.