Máxima de Holanda y Charlène de Mónaco acompañaron a sus respectivos esposos a la ceremonia de despedida de la reina Isabel II y para hacerlo ambas siguieron el luto que exige el protocolo para la ocasión.
La reina consorte asistió junto a su esposo, el rey Guillermo, y a Beatriz, la reina emérita.
Ataviada en el luto reglamentario -como todos los demás asistentes- coincidió en su elección con Kate Middleton: el vestido-abrigo, que en el caso de la argentina fue el modelo Izar Coat de la firma Natan Couture.
Lo combinó con zapatos de gamuza negra, los Gianvito 105 (de Gianvito Rossi) y sumó un clutch del mismo material que ya había utilizado en otras oportunidades, así como el sombrero con redecilla y los guantes con los que complementó su outfit.
La coincidencia con Charlène, con un look sobrio y elegante
Del brazo de su esposo, Alberto II de Mónaco, se vio a la princesa Charlène ingresar a la ceremonia de despedida final de la reina Isabel II en Londres, en horas de esta mañana.
La sudafricana vistió de luto reglamentario, para el que eligió un vestido-abrigo hecho a medida de Terence Bray, sumándose en su elección a la reina Máxima y a Kate Middleton.
Charlène complementó su look con una tote bag de cuero de Prada y zapatos stilleto de cuero y charol, firmados por Dior. Cubrió su cabeza con un sombrero sin ala, con un detalle en la parte posterior.
