Las plantas son ideales para decorar cualquier rincón de la casa. Si bien es cierto que existen especies fáciles de cuidar y mega resistentes, puede pasar que nos excedamos con los riegos y terminen "ahogándose".
Este factor es uno de los principales motivos por los que nuestras amadas plantas de interior terminan con sus raíces dañadas y, en muchos casos, se marchitan definitivamente.
Pero no todo está perdido... La buena noticia es que existen algunos tips para revivirlas y que permanezcan espléndidas durante mucho tiempo. Acá te contamos cuáles son.
Síntomas de que una planta tiene exceso de agua
- Ausencia de nuevos brotes.
- Debilitamiento.
- Hojas que apenas crecen o que nacen en tonos marrones.
- Amarilleamiento de las hojas inferiores.
- Caída de hojas y flores.
- Sustrato compactado o que, incluso, adquiere un tono verdoso.
- Estrechamiento de la base del tallo.
Cómo revivir una planta "ahogada" y con raíces dañadas
Si ya descubriste que tu planta está "ahogada", es el momento perfecto para actuar y evitar que se marchite por completo. Acá te acercamos los pasos a seguir:
- Retirá la planta de su maceta con mucho cuidado.
- Cortá las raíces podridas con una tijera para jardinería.
- Colocá papel absorbente sobre las raíces y espera algunas horas. Si es necesario, cambiá el papel mojado.
- En una nueva maceta, coloca piedras y sustrato poroso para garantizar un buen drenaje.
- Colocá tu planta en su nueva maceta
- Agrega tierra nueva.