En el Día Mundial de la Sonrisa, especialistas ponen énfasis en la importancia de tratar integralmente a las personas que nacieron con fisura labio palatina (FLAP), malformación que afecta a miles de niños en todo el mundo.
Según la organización Smile Train, nace un niño con fisura labio palatina cada 3 minutos en el planeta, mientras que en nuestro país se estiman más de mil nacimientos de bebés con esta afección cada año.
La fisura labio palatina es mucho más que una cuestión cosmética. Los niños con esta patología pueden presentar dificultades para comer, escuchar, hablar e incluso respirar, además de que pueden sufrir acoso escolar (bullying) y exclusión social. Esta patología requiere de un tratamiento integral que consiste en mucho más que una primera cirugía.