Si sos fanáticos de los años setenta y muchas veces sentiste que naciste en el año equivocado, con esta tendencia vas a poder al menos simular como que te estás preparando para ir a bailar a Studio 54. Es que si bien hay un auge por la ropa noventosa y dosmilera, lo cierto es que en materia beauty la década que va es la de los años 70. El disco en su máximo esplendor.
Entre Diana Ross y Abba
La música siempre ha sido una gran fuente de inspiración y con las canciones de Diana Ross y Abba volviéndose tendencia en las redes sociales, fueron muchos los que empezaron a copiar los estilos de estos artistas. Así se empezaron a ver muchos brillos y maquillajes de colores.
Una serie llamada Euphoria
Pero la inspiración de esta nueva tendencia no solo viene de la música lo cierto es que Euphoria, la serie de HBO, marcó mucha tendencia con los estilismos de sus protagonistas dentro y fuera de la pantalla. Zendaya se ha convertido en todo un icono de moda y ella suele lucir en la red carpet maquillajes del estilo disco glam. Al igual que su compañera, Alexa Demie, cuando interpreta a Maddy.
Sombras de ojo vibrantes
En el disco glam, son los ojos los protagonistas indiscutidos y se llevan con sombras de ojos vibrantes. No hay color que no vaya, lo ideal es que acompañe de alguna manera al look elegido. También se puede agregar un delineado en el mismo tono o en un color que se complemente.
Mucho brillos
Pero si pensamos que todo terminaba ahí, estamos equivocados. La idea es complementar el maquillaje con brillos que acompañan al delineado o que se llevan a modo de detalle. La purpurina en tonos metalizados también se verá mucho. Todo con el objetivo de iluminarnos el rostro.
Labios neutros
Eso sí, como le estamos dando todo el protagonismo a nuestros ojos, lo ideal es contrarrestar un poco y llevar los labios en tonos nude o tierra, el gloss también aplica. En el pelo vuelve el volumen ya sea con sutiles ondas o directamente con rulos. La vibra vintage ha conquistado al mundo beauty y esta temporada promete hacernos brillar.
