La ofrenda en el Cenotafio de Londres a los caídos en combate durante la semana del Día del Recuerdo o Remembrance Day es uno de los actos más señalados del año para la familia real británica. El rey Carlos III presidió por primera vez como monarca esta ceremonia y hasta se emocionó en el momento en que se colocaba su corona de amapolas, la flor emblemática del Remembrance Day.
La reina Camilla, quien por primera vez también realizó su ofrenda floral, presenció el acto desde el balcón de la oficina de Desarrollo, Commonwealth y Extranjero, junto Kate Middleton, quien estrenó su título como princesa de Gales en esta ocasión.
El príncipe William también depositó una corona y participaron también del acto el resto de miembros de la familia real británica que representan a la Corona de manera oficial: el príncipe Eduardo y la condesa Sofía de Wessex, la princesa Ana y el almirante Tim Laurence, los duques de Gloucester, el duque de Kent y la princesa Alexandra, en su primera aparición desde los funerales de Isabel II.
Las joyas de Kate y de Camilla: Lady Di presente y nuevo broche como princesa de Gales
Tanto la Reina Consorte como la Princesa de Gales llevaban las simbólicas amapolas rojas prendidas de sus ropas oscuras, a las que la reina Camilla sumó un broche con forma de corneta.
En cuanto a Kate, lució aros de perlas y diamantes que Lady Di que solo había usado una vez. Lo que resultó llamativo es que estrenó un nuevo broche, el primero desde que es princesa de Gales que no hereda de Isabel II.
Si hasta ahora lo habitual era que en este tipo de actos tan destacados usara las piezas de joyería que ya formaban parte de la colección de palacio antes de su ingreso en la familia real, ayer la princesa de Gales llevó este broche inédito, semioculto tras las amapolas que la familia real británica luce durante el Remembrance Day pero identificado poco después de la ceremonia por UFO No More, una web especializada en la identificación de las prendas y joyas que lucen las mujeres de las distintas familias reales.
Según esta web, el nuevo broche de Kate fue vendido el pasado enero (mes en el que casualmente cumplió 40 años) por 16.590 euros en la casa Bentey & Skinner, una histórica joyería de Mayfair que es proveedora oficial de la casa real británica desde tiempos de la reina Victoria.