Las petunias son una de las flores más populares para decorar cualquier espacio al aire libre. Y es que su largo periodo de floración, sumado a su buena resistencia y capacidad de alegrar hasta los rincones más sombríos, la convierten en una de las plantas más populares y recomendadas para tener en casa.
Pero lo mejor de todo es que podés encontrar una inmensa variedad de flores de petunia con una amplia gama de colores; pétalos lisos u ondulados; colores simples, rayados o con bordes en pico; ¡y hasta distintos perfumes!
Petunia: la planta nativa perfecta para llenar de color los exteriores
La petunia es una planta de exterior cuyos pétalos tienen una forma similar a la de una trompeta. Es originaria de Suramérica -concretamente de Argentina y Brasil- aunque está ampliamente extendida geográficamente.
Si bien es muy común verla en balcones y terrazas, también se cultiva mucho en patios y jardines.
El nombre de petunia proviene de la palabra tupi-guaraní “petun” que significa “planta inútil de tabaco” ya que las flores de ambas plantas son muy similares estéticamente
También conocida como 'flor de los aztecas', sus flores de diferentes colores (blanco, rosa, violeta, a rayas, etc.) pueden llegar a medir hasta 13cm y florecen desde la primavera hasta principios de otoño desprendiendo un exquisito aroma dulce.
Cuidados de la petunia
- Luz y ubicación: la petunia es amante del sol. Por eso necesita crecer en lugares muy luminosos y tener entre 4 y 5 horas de sol directo a diario. Si bien puede crecer en espacios con sombra parcial, ofrecerá muchas menos flores.
- Temperatura: prefiere los climas cálidos, con temperaturas que oscilen entre los 16 y 25º C. No resiste las heladas ni las temperaturas muy bajas, así como tampoco los vientos fuertes y las lluvias.
- Riego: deben ser frecuentes pero moderados evitando los encharcamientos. Durante los meses más calurosos, se recomienda cada dos o tres días pero sin que el agua caiga directamente sobre sus pétalos. En invierno es clave reducir la frecuencia.
- Sustrato: agradece uno rico en nutrientes y con un buen drenaje que airee sus raíces y evite posibles encharcamientos.
- Fertilizante: para contribuir aún más a su crecimiento, se recomienda aplicarle fertilizante cada dos semanas en primavera y en verano.
- Poda: lo ideal es hacerlo una vez al año a partir de su primera floración para que crezca con más fuerza.