¿Quién no escuchó "Happy" en algún momento de sus vidas? La canción más pegadiza del mundo es interpretada por Pharrell Williams. Y él, fue anunciado este martes como el nuevo director creativo de Louis Vuitton hombre, un espacio que había quedado vacante luego del sorpresivo fallecimiento de Virgil Abloh.
Eran muchos los nombres que andaban dando vueltas para ocupar el tan deseado puesto y muchos pensaban que iba a ser de Colm Dillane, fundador de KidSuper, luego de participar en la creación de la colección Otoño-Invierno 23 de la firma que vimos hace poco. Pero claramente no fue así y hoy Pharrell suma un nuevo título a su CV.
¿Quién es Pharrell?
A pesar de que es muy reconocido como artista, ganó trece premios Grammy, lo cierto es que Williams no es ajeno al mundo del diseño. Es copropietario de la marca Human Made, junto a Nigo, director creativo de Kenzo. También es fundador de marcas como Billonaire Boys Club y Ice Cream, y suele colaborar con firmas de la talla de Tiffany & Co. Embajador de Chanel desde hace muchos años, tiene una línea de cosmética de genero neutro, Humanrace, que lanzó en 2021.
El mensaje de Louis Vuitton
"Me complace dar la bienvenida a Pharrell de vuelta a casa, tras nuestras colaboraciones en 2004 y 2008 para Louis Vuitton, como nuestro nuevo Director Creativo Masculino. Su visión creativa más allá de la moda llevará sin duda a Louis Vuitton hacia un nuevo y muy emocionante capítulo" dijo Pietro Beccari, Presidente y Director General de Louis Vuitton en un comunicado de la firma. Y es que esta, es su primera gran decisión desde que asumió a este puesto en febrero de este año.
Una marca con historia
Louis Vuitton dejó su ciudad natal luego de que su padre se casara con otra mujer que lo trataba mal. Ya no había nada que lo una a Anchay, su madre había muerto, así que siendo tan solo un adolescente partió a París. Y creció al ritmo de la ciudad. Su primer trabajo fue como preparador y embalador en un taller y allí conoció los secretos para crear el mejor equipaje. Cuál era la madera correcta, cuál debía ser la forma y cómo se podía lograr la ligereza. Además, entendió que el interior debía ser según la necesidad de cada cliente. En 1954 se casó y también abrió su primer espacio que servía de taller y también de vivienda. Fue ahí donde realizó su primer baúl con el que logró popularidad, convirtiéndose en el objeto must-have para todo viajero de la alta sociedad parisina de la época.
Louis Vuitton se expandió hasta 1914 con el comienzo de la Primera Guerra Mundial. Pero antes, también fue víctima de plagios, ya que muchos solían copiar sus productos, aunque nunca podían lograr la calidad de la firma francesa. Cansado de la situación fue su hijo George el que 1896 puso fin al a esto cuando creó el monograma que hoy todos conocemos. Las iniciales LV, una flor de cuatro pétalos encerrada en un diamante, la misma flor en positivo y una flor de pétalos redondos encerrada en un círculo. Y el resto es historia, la firma se proyectó internacionalmente y hoy es la firma estrella de LVHM, el conglomerado de marcas de lujo comandado por Bernard Arnault, hoy el hombre más rico del mundo.
