La hiedra es una de las plantas trepadoras más populares para tener en exteriores y enredar en una pérgola o en un muro. Sin embargo, como el verde natural está cada vez más presente en la deco de interiores, muchas personas deciden cultivarla en los diferentes ambientes de su hogar.
Y una de las variedades de hiedra más elegidas para cumplir con esta función, es la variegada.
Para que te des una idea las hojas de la hiedra variegada son triangulares y de color verde con sutiles toques amarillos/blanquecinos debido a la falta de clorofila.
Y precisamente esta característica es la responsable de que crezca más lento que la hiedra convencional.
Capaz de trepar, por lo menos, un metro y medio de altura, es muy conocida por su increíble capacidad de purificar el aire, eliminando entre el 80 y el 90% del benceno presente en plásticos, resinas o fibras sintéticas.
Además, gracias a su interesante caída, es una de las mejores plantas para colocar en estantes y/o bibliotecas.
Cómo cuidar la hiedra variegada
- Luz y ubicación: si bien puede crecer y desarrollarse en interiores con poca luz, se recomienda colocarla en espacios con buena luz natural pero sin sol directo, y siempre evitando las corrientes fuertes de aire.
- Temperatura: las ideales oscilan entre los 12 ºC y los 20 ºC. Si bien puede tolerar algunas heladas, se recomienda evitarlas.
- Riego: moderado, se recomienda hacerlo dos veces por semana en verano y una en invierno, y siempre comprobando que el sustrato esté seco antes de volver a regar.
- Sustrato: agradece un suelo rico en nutrientes, algo alcalino y con un buen drenaje que evite los encharcamientos y airee sus raíces.
- Fertilizante: para contribuir a su crecimiento se le puede aplicar abono líquido disuelto en el agua de riego. Eso sí: es clave hacerlo cada 15 días sólo en primavera y verano, y siempre siguiendo las indicaciones de una persona especializada.
- Poda: por lo general, se realiza una o dos veces al año y en verano. Solo hay que recortar las puntas de sus hojas para que sea más compacta y los tallos más fuertes.