Después del paso del verano por nuestro pelo (radiación solar, salitre, cloro, viento) comienza el otoño y podemos añadirle el estrés del inicio de año escolar y laboral, entre otros factores que pueden afectarlo.
Toda esta sumatoria puede ocasionar un caos en nuestra salud capilar, impactando de manera negativa en nuestra melena.
Una especialista explica cómo y por qué se pudo haber dañado el pelo y nos da las claves para recuperarlo.
Qué daños arrastra nuestro pelo del verano
Puede que notemos que el pelo se cae más de la cuenta, que su apariencia sea más apagada y débil. Estos cambios pueden deberse a cómo le afectaron los factores del verano a nuestro pelo. Sabrina Alberti, responsable de Comunicación Científica de Biferdil explica en detalle:
Para comenzar, la radiación (que es más intensa en los meses del verano) solar puede afectar la hidratación y la coloración del pelo. Podemos experimentar mayor decoloración -sobre todo en los medios y puntas- o tendencia a ciertas tonalidades, rojizas y anaranjadas que lo hacen ver deslucido.
Asimismo, el calor y los rayos UV dañan la capa lipídica de la cutícula capilar, ocasionando deshidratación, por evaporación del agua.
A su vez, los cambios bruscos de temperatura provocan encrespamiento, sequedad y pérdida de brillo.
Qué pasa con el cuero cabelludo
El cuero cabelludo "también sufre la radiación solar, alterando su microbioma. Se produce un desequilibrio importante del ecosistema, conocido como disbiosis, lo que puede generar caspa, acumulación de grasa, dermatitis seborreica, picazón, irritación, descamación, resequedad e inflamación", especifica.
Si es que notamos un aumento en la caída, esto puede deberse al debilitamiento y a una micro inflamación de los folículos pilosos.
Otro de los factores es el agua de mar que "además del agua en sí, contiene cloruros, sulfatos, sodio, magnesio, calcio, entre otros. Si bien nuestro cabello está compuesto principalmente de keratina (proteína), nuestras hebras tienen enlaces cruzados entre estas proteínas. Estos enlaces tridimensionales son una formación de enlaces covalentes entre aminoácidos adyacentes".
Como contiene sal que "atrae más agua formando más cristales de sal, un proceso que elimina la humedad del interior de nuestro cabello, provocando resequedad y quiebre. El agua de mar no es amiga de los cabellos normales y secos, ya que tiene un pH de 7,8 aproximadamente, provocando una reducción en el brillo, en la consistencia y la elasticidad. Todos estos daños empeoran en pelo teñido".
El agua de las piscinas no se queda atrás: "El cloro, además de resecar el cabello, también puede generar modificaciones en la coloración, por eso siempre recalcamos la importancia de proteger al cabello antes y en el momento en el que nos metemos al agua".
Finalmente, el viento "puede generar daño ya que elimina por completo la humedad, causando nudos, puntas abiertas, frizz y quiebre".
Si tu pelo sufrió algunos o todos estos daños, Sabrina Alberti explica cómo podés recuperarlo, paso a paso.
Plan para recuperar el pelo post verano
"Siempre es recomendable realizar un corte de puntas en los casos más extremos como para arrancar", comienza Alberti.
La recuperación del cabello incluye la suma de los cuidados y “mimos” diarios que le damos en nuestra rutina.
En los hábitos diarios, explica, primero tenemos que analizar cómo está el cuero cabelludo: ¿Está graso o seco? ¿Tiene descamación? ¿Está enrojecido o inflamado? "Todas estas preguntas nos ayudan a, en primer lugar, elegir el shampoo adecuado".
Recordemos que el shampoo apunta a limpiar el cuero cabelludo: los medios y puntas se limpian por arrastre. Por eso es que el shampoo se aplica sobre el cuero cabelludo únicamente.
Si el cuero cabelludo esta sensibilizado, "podés recurrir a un shampoo sin sulfatos que siempre son más gentiles con la piel del cuero cabelludo". En cambio, si está con tendencia a la grasitud "es preferible un shampoo que contenga activos/ complejos que regulen esa secreción sebácea". Por otra parte, "si experimentamos caída, es primordial actuar rápido para frenarla. Podés recurrir a lociones, que se aplican exclusivamente en el cuero cabelludo tres veces por semana o ampollas".
Qué pasa con los medios y puntas
La especialista ya nos recomedó el corte de puntas para darle una apariencia más sana, aunque aclara que también hay otros recursos para recuperarlo del daño.
En una melena larga, los medios y puntas nos acompañan hace años y carecen de renovación, por lo cual requieren un cuidado extra. "La recomendación post verano es realizar, al menos una vez a la semana, una mascarilla que nutra en profundidad".
"Si podemos evitar de manera habitual las herramientas de calor, mucho mejor" y si no, "utilizarlas siempre acompañadas de un protector térmico para evitar, así, que el pelo se dañe aún más.
"Una buena opción de reforzar la recuperación son las ampollas, que también se recomiendan usar una vez a la semana, según la necesidad de cada melena. "Recomiendo las que reponen nutrientes estructurales como keratina".
Para aplicar después de lavado y con el cabello húmedo "son buenos aliados los aceites, ya que sellan el cabello y ayudan a retener la humedad . Lo mismo pasa con los sérums reparadores de puntas, que alisan la cutícula y mitigan ese daño, para que el pelo tenga un aspecto más sano y pueda reflejar la luz".
Qué hacer frente a los cambios de coloración
Este fenómeno "se ve claramente en los tonos rubios, por efecto del proceso de oxidación, las partículas de las coloraciones son altamente inestables. Los tonos oscuros también las experimentan, tirando a los rojizos". En estos casos, podemos recurrir a la combinación de un shampoo y mascara matizadora, para combatir los tonos indeseados.
Productos asociados: Línea Bioxidil: shampoo/loción/ampolla; Línea Alta Pureza sin sulfatos; Línea renovación celular, libre de gluten y sin sulfatos; Línea matizadores; Oleo de Argán; Protector térmico.
Agradecemos el asesoramiento de Sabrina Alberti responsable de comunicación científica de BIFERDIL