Letizia Ortiz comenzó su agenda laboral de la semana yendo a la Biblioteca Nacional de Madrid, donde visitó la exposición "Nebrija. El orgullo de ser gramático. "Grammaticus nomen est professionis"", en el marco de las actividades que se desarrollan por el V centenario de la muerte de Elio Antonio de Nebrija.
La muestra se compone de más de un centenar de piezas procedentes de las colecciones internas de la biblioteca, las cuales se ven acompañadas por otras creaciones prestadas por una decena de instituciones españolas.
Para esta ocasión, recurrió a su amado vestido de lunares de Massimo Dutti que estrenó hace cuatro años atrás.
Letzia adoptó un original vestido de lunares que estrenó hace cuatro años
Para esta visita cultural, la monarca recuperó una de las tantas piezas que tiene en su guardarropas y que tiene el sello español de Massimo Dutti.
En concreto, se trata de un vestido estampado de lunares en tonos rosas, azules y verdes sobre fondo azul marino de la colección lanzada en octubre de 2019 que se caracteriza por presentar cuello redondo y abertura en forma de lágrima en el escote, manga larga con acabado abullonado muy sutil y cintura entallada con estratégicos drapeados.
La royal adoptó los mismos complementos con los que combinó el vestido la primera vez que lo llevó en Seúl: unos stilettos en color bordó que combinan cuero y gamuza de Magrit y una cartera de mano a juego de la misma firma.
En cuanto a la elección de joyas, la monarca. Doña Letizia optó por unos aros de triple argolla de Gold & Roses, de oro rosado y diamantes y su anillo de Coreterno, que ya es un clásico en todos sus estilismos.
