Si estás en plan de llenar de elegancia y perfume tu jardín, la dama de noche es la candidata perfecta. Pero hay un detalle que la diferencia del resto: sus delicadas flores blancas desprenden un exquisito aroma y solo se abren durante las noches de verano durante unas pocas horas.
Y hay algo más... Según el Feng Shui, es una planta muy conocida por ser mensajera de buenas noticias y atraer la fortuna.
También conocida por su nombre científico como Epiphyllum anguliger, es una planta de la familia de las cactáceas que se define por la forma de sus hojas carnosas y planas, con forma de zigzag. Crece bastante rápido y lo hace dejando colgar sus tallos hacia abajo.
Es nativa de México, donde crece en el exterior de forma epífita, es decir, que no crece en la tierra, sino en las ramas o en los troncos de los árboles.
Una de las cualidades más destacadas de esta delicada planta es lo fácil que es cultivarla en casa. Es súper resistente y apenas necesita cuidados. Esto la convierte en una opción perfecta para principiantes en el mundo de la jardinería.
Además, se puede cultivar tanto en interiores como en exteriores.
Cómo cuidarla
- Luz: necesita de sombra parcial para poder desarrollarse correctamente y se recomienda evitar los extremos: pleno sol y sombra total.
- Temperatura: prefiere los climas cálidos y los inviernos no muy fríos.
- Riegos: no necesita de riegos muy frecuentes: basta con hacerlo cada dos días evitando los encharcamientos y asegurandonos que el sustrato esté seco entre riego y riego.
- Sustrato: si bien no es muy exigente y se puede adaptar a cualquier tipo de suelos, se recomienda optar por uno rico en nutrientes y con un buen drenaje.
- Fertilizante: conviene siempre agregar, junto con el agua de riego durante toda la primavera y el verano, algún fertilizante líquido indicado para esta especie.
- Poda: se recomienda cortar sus ramas cuando termine el invierno.