Los límites son una temática trending topic en el ámbito de la salud mental y tienen relación directa en el tipo de comunicación que se establece con los otros. Conocer qué son y cómo funcionan los límites es fundamental para entender cuestiones de la personalidad y emociones como la ansiedad o el estrés, cuya aparición puede estar vinculada a una falta al momento de colocarlos en diferentes ámbitos de la vida cotidiana. “Si yo no pongo límites le estoy dando más importancia a lo que siente el otro”, cuenta Laura Teplitzky, psicóloga especialista en trastornos mentales.
Detectar aquellas situaciones en las que no resulta posible establecer límites claros ayuda a comprender cuestiones relacionadas a la personalidad que aparecen como desencadenantes de emociones del estilo de la ansiedad, el estrés y la culpa. Teplitzky es psicóloga y desde hace 30 años trabaja en diagnósticos de ansiedad mediante técnicas de tapping y mindfulness. En una entrevista con Para Ti, la licenciada explicó qué son los límites y de qué forma cambia nuestra perspectiva sobre temas de la vida diaria al establecerlos.
Para Ti: ¿Qué tienen que ver los límites con la ansiedad?
Laura Teplitzky: El hecho de no poner límites genera diferentes emociones, entre esas, te genera ansiedad. El hecho de querer decir que no a cierta situación y encontrarte teniendo que decir que sí cuando vos no querés, ahí se genera toda una contradicción. Una de las emociones que puede surgir es la ansiedad.
Para Ti: ¿Cómo podríamos definir a los límites?
Laura Teplitzky: Los límites son esas fronteras o esas líneas imaginarias que nosotros armamos y en donde decimos “de acá para allá no se puede pasar, hasta acá es mi límite personal”. Si vos pasás de esa línea, es como que de algún modo me estás avasallando.
De acuerdo a lo que explica la especialista junto a OSDE, la idea fundacional en término de límites radica en priorizarse, poner los sentimientos propios por delante de los de un tercero. El objetivo es no generar una contradicción entre lo que necesitamos y queremos y lo que terminamos haciendo.
Culpa: ¿es hereditaria o la construimos en base a creencias?
Si esta nota fuera un Q&A la opción correcta para responder ante la pregunta del subtítulo sería “la construimos en base a creencias”. Según la información que brinda Teplitzky, la culpa aparece con regularidad en situaciones que tienen que ver con la inacción ante el establecimiento de límites y son creencias (conjuntos de ideas y patrones negativos de pensamiento) que se forman entre los 6 y 10 años.
#DiccionarioParaTi: las creencias son ideas que, tal vez hoy no reconocemos, nos han transmitido nuestros padres, abuelos y maestros. Esas creencias pueden ser, por ejemplo, 'sos malo si decís que no'.
Para Ti: ¿Cómo se puede aprender a poner límites?
Laura Teplitzky: Los límites son creencias. Aprender a poner límites es una habilidad que tiene que ver con la comunicación, poder decirle al otro lo que yo quiero, lo que yo pienso y lo que yo necesito de una manera diplomática. Es 'me respeto' en primer lugar. Se puede aprender a poner límites como cualquier otra habilidad a lo largo de toda la vida.
Tips para empezar a poner límites:
- Entender que es un proceso que lleva tiempo
- Lo recomendable es comenzar a aplicarlos en ámbitos más amigables (como lo puede ser el ámbito hogareño y familiar).
- Finalmente implementarlos en espacios más desafiantes.
Para Ti: ¿De qué manera se trabaja con la reacción de un otro cuando se empieza a poner límites donde antes no había?
Laura Teplitzky: Lo que hay que trabajar mucho es la seguridad y la autoestima, entendiendo que cuidarse a uno mismo y quererse es más importante que si el otro deja de quererte, porque te estás respetando. Tiene que ver con la autoestima.
Para Ti: ¿Tenés algún caso escuela en relación a cómo perjudica no establecer límites?
Laura Teplitzky: Yo trabajo bastante con el tema de la alimentación, y esa problemática está muy asociada a los límites. Por ejemplo, quien decide cuidarse con la cuestión nutricional se expone constantemente a situaciones en las que debe decir que no al momento de elegir qué tipos de alimentos consumir y en qué cantidades.
Perjuicios de no instaurar límites personales
No poner límites sofoca: afecta en el terreno psíquico, el físico y el emocional. Dice Laura Teplitzky que cuando vas en contra de lo que siente el corazón todo se desequilibra y que lo importante es “estar en eje, en armonía y atento a los sentimientos”.
“Lo más importante es aprender a querernos y respetarnos. Tal vez venimos de una educación en la que nos enseñaron que primero están los demás. Uno tiene que romper con todas estas creencias y darse cuenta de que lo importante es uno. El tiempo de evolución depende de cada caso, y siempre es recomendable consultar con un profesional y trabajarlo en un consultorio con diferentes técnicas”, sostiene.