Charlène sorprendió con su nueva imagen en el Gran Premio de Fórmula 1 que se corrió en Mónaco este domingo.
En un evento repleto de famosos, la princesa acompañó a su esposo, Alberto, y acaparó todas las miradas con su nueva apariencia: se despidió del rubio que llevó durante gran parte de su vida y se pasó al castaño.
Ya venía dejando de lado el pelo tan claro algunas semanas atrás, cuando se la vio con sus mechas chunky, una técnica de coloración de base oscura con marcadas mechas platinadas.
Ahora se lo terminó de oscurecer, optando por un chocolate oscuro con iluminación, que le aportan textura visual y reflejos.
Charlène transformó su look de día en uno de noche
Por la noche la Princesa volvió a acaparar las miradas, cuando apareció en la cena de gala del Sporting Club de Montecarlo con motivo del GP.
Luciendo un vestido asimétrico blanco y negro tipo túnica firmado por Valentino, Charlène le dio otra impronta a su peinado.
En esta ocasión, lo peinó con efecto wet hacia un lado, retirando por completo el flequillo de su frente. Un truco ideal para quienes llevan el pelo corto y que le brinda un aire sofisticado, completamente renovado de como se ve en seco.
Su maquillaje también fue mucho más intenso, destacando la mirada en negro y sombras rosadas y delineando sus labios por fuera para conseguir mayor volumen.
Hace justo un año, la esposa de Alberto de Mónaco reapareció tras 15 meses alejada de la vida pública, en lo que fue un largo proceso de recuperación física y emocional después de contraer una grave infección en mayo de 2021 en Sudáfrica.
En aquel entonces, sorprendió con su corte pixie, platinado y súper corto, que fue muy comentado.
