"Esta colección Prêt-à-porter Primavera-Verano 2024 es una oda a la libertad y al movimiento, y cuenta una historia que tiene su origen en los jardines de la villa Noailles", es la explicación que da Virginie Viard cuando le preguntan sobre su nueva colección presentada en la Semana de la Moda de París.
A poca distancia del mar, en lo alto de las colinas de Hyères, la villa modernista de Charles y Marie-Laure de Noailles, diseñada por el arquitecto Robert Mallet-Stevens en 1923, está bañada por el sol. Sus numerosos jardines en terrazas, rodeados de bahías a través de las cuales el paisaje se corta en otras tantas imágenes, ofrecen una libertad idílica.
Mirando hacia el sur, los volúmenes y espacios exteriores de la villa, desde su jardín cubista a cuadros hasta sus macizos de flores hundidos, iluminan la colección Prêt-à-porter Primavera-Verano 2024 con una intensa vitalidad. La luz y el color, la profusión de motivos geométricos, el juego de contrastes de asimetrías, mosaicos, líneas, cuadros y rayas dan ritmo a una colección que expone su propia idea de elegancia y despreocupación.
Hay batas de tweed multicolor, negro o rosa, y chaquetas de rizo a rayas de todos los colores. Trajes de neoprene, vestidos y pantalones de encaje están adornados con motivos florales. Esta alegría de vivir se extiende a vestidos cortos y un top con pliegues de rayos de sol, bermudas a rayas y chaquetas cruzadas que se usan abiertas con las manos en los bolsillos.
"Sofisticación e informalidad, el tweed en toda la colección, ropa deportiva y encaje: intenté unir una cosa y su opuesto de la manera más cool posible. Y los jardines y la piscina de la villa Noailles, ese entorno excepcional, se prestan bastante bien a ello", comenta Viard.
Trajes de baño, babydolls de organza, ropa deportiva y vestidos de noche siguen el mismo camino bañado por el sol. La ropa se libera de las restricciones y se emancipa de la estructura. Las cinturas son bajas y los tacos planos. Los trajes son ligeros y muy flexibles: sin charreteras ni forro.
Chalecos, cárdigans llevados como vestidos con sensación de libertad, pantalones con bolsillos, pantalones cortos de pernera ancha y faldas asimétricas, lazos y pliegues completan este estudio de la vida en movimiento. Una cierta idea de sensualidad impregna las piezas (vestidos, camisas, enaguas, sujetadores) en organza negra, cuya transparencia permite infinitas capas.
Las referencias a Marie-Laure de Noailles y Gabrielle Chanel, unidas por su fuerza de carácter y su amistad con la vanguardia artística, se unen en las gafas de sol negras adornadas con cadenas de oro.
Animada por un ambiente de alegría, deporte y celebración, la colección Prêt-à-porter Primavera-Verano 2024, elegante y desenfadada, es una invitación a disfrutar de la vida al aire libre.
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