Durante este fin de semana, se celebró la preboda entre Victoria de Hohenlohe y Maxime Corneille, que tuvo lugar en el Palacio del Campo Real. Entre los invitados especiales, se encontraron varias figuras de la realeza entre ellas Máxima Zorreguieta y su hija, la princesa Amalia, que fue vista con dos looks.
Por un lado, la hija de los reyes de Países Bajos, optó por un vestido midi de muselina de seda de Natan Couture, estampada con detalles en azul, de la colección SS21. Esta pieza ya había sido utilizada por la princesa en enero de este año, por lo que volvió a mostrarse a favor de la moda circular y sustentable.
Esto también se pudo apreciar con la elección de su calzado: zapatos rojos de la firma Gianvito Rossi, que pertenecen a su madre Máxima. Además de sus joyas personales, llevó un tocado dorado de Maison Fabienne Delvigne.
Horas después, llevó un estilismo con marcado acento flamenco: un chal español negro de Manila, con detalles de flores rojas, que ya había lucido a principios de abril de este año. Como accesorio, lució una cartera de hombro, confeccionada en cuero verde firmada por Jacquemus.
En este look en particular, también decidió tomar prestados algunas joyas de su madre. En este caos, unos pendientes plateados de flores de rubí, que iban en combinación perfecta con todo el outfit en general. El detalle acá sin dudas fue la flor roja que llevó para decorar su peinado, un guiño a la cultura española.
