Con el sello de Isla Architects, este proyecto consistió en reformar una antigua casa en Banyalbufar, un pueblo costero ubicado en la falda de la Sierra de la Tramuntana. Para lograrlo, se rehabilitó la estructura original, el tejado y las fachadas, así como también el interior.
Por otro lado, se eliminaron todos los elementos no originales añadidos a lo largo del tiempo para enfatizar el carácter de la casa, de suelos a mobiliario. Una vez "limpia" se sumaron nuevos elementos contemporáneos.
Este equilibro entre nuevo y antiguo, moderno y rústico, aporta una nueva vida a la casa, permitiendo entender la arquitectura tradicional a través de una nueva mirada.
Kitchen
La cocina está embutida dentro de los muros de la casa para resaltar la pureza del techo abovedado, y a la vez aportar flexibilidad al espacio.
Los nichos existentes fueron ampliados para esconder los electrodomésticos -la heladera, el horno y el lavarropas-, y contar con todo el almacenamiento posible para guardar vajilla, cubiertos, comida y artículos de limpieza.
La cocina se sitúa debajo de la ventana, ofreciendo la experiencia de cocinar con vistas sobre el Mediterráneo y conectando con el espacio exterior.
La bacha está fabricada de hormigón pigmentado, el cual está abujardado para expresar su materialidad, como una reinterpretación de las picas mallorquinas de piedra tradicionales. La grifería es un simple tubo de latón doblado a medida.
Una mesa de color rojo cangrejo -diseñada especialmente para este espacio- funciona como nodo de la cocina dispersa, permitiendo la celebración de comidas, celebraciones y trabajo.
Living
Este espacio fue "limpiado" en su totalidad para enfatizar el mobiliario original de la casa y también las nuevas piezas. El piso hidráulico no original fue sustituido por un suelo de trispol, recuperando la esencia material de la vivienda así como enfatizando la conexión dentro-fuera.
Las bóvedas de arista del techo se trataron con cal viva a la antigua usanza, consiguiendo un acabado suave, puro y brillante. Una luminaria pivotante permite desplazar la acción de la cocina al living.
Baño
Ganar altura, limpiar la geometría y aumentar sensiblemente el tamaño de la ventana. Esos fueron los requisitos para convertir el baño en un espacio más cómodo y luminoso. Un microcemento suave de tono terroso sustituye los pisos hidráulicos no originales y contrasta con el muro de piedra existente descubierto durante la construcción.
Dormitorios y biblioteca
Se sustituyen los suelos hidráulicos por un piso de terracota hecho a mano en Mallorca, consiguiendo una sensación más cálida y agradable en el espacio. Las camas mallorquinas originales se conservan como elementos principales de las habitaciones. La altura de estas camas permite la vista directa al mar. Un sueño.
Exterior
Tanto el tejado como la fachada trasera se renovaron siguiendo técnicas tradicionales de construcción, y se abrieron pequeñas ventanas al patio trasero para favorecer la ventilación cruzada.
Siguiendo la tradición medieval mallorquina de pintar el reverso de las tejas que conforman la cornisa -“teules pintades”- se invitó al artista Luis Urculo a reinterpretar esta expresión pictórica popular. Se cree que los símbolos de color óxido traen buena suerte y mantienen alejados a los malos espíritus de los habitantes de la casa.
Ficha técnica
Ubicación: Bañalbufar, España
Arquitectos: Isla Architects
Superficie: 138 m2
Año: 2017
Fotos: Luis Díaz Díaz
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