Flavia Palmiero visitó este sábado la mesaza de Mirtha Legrand. La actriz vivió un momento de nostalgia cuando la conductora le preguntó por sus hijos -Giuliana y Gianmarco Batellini- y ambas recordaron cuando eran chiquitos y pasaban sus veranos en Punta del Este.
"¿Te acordás en Punta del Este cuando recién nació y te fuimos a visitar, a José Ignacio?", preguntò Palmiero sin aclarar a cuál de sus hijos se refería, mientras Mirtha asentía con la cabeza. "Estaban ahí compartiendo... era una cosa muy habitual", agregó Flavia.
"Mirtha siempre se ocupó de sus nietos. Siempre cuento la anécdota de cuando Nacho y Juanita eran chiquitos y me llamó para decirme que querían ir a verme al teatro. Y me llamaba ella directamente, me decía 'soy yo, Mirtha', los chicos quieren ir a verte al teatro... Me da mucha ternura, ahora están muy grandes", continuó Palmiero, que recordó que ese momento estaba protagonizando el infantil "La ola está de fiesta".
Luego, la actriz habló de sus hijos y de por qué ambos están trabajando fuera del país. "Los míos ya están grandes también. Giuliana tiene 34 y Gianni, 29", comentó, a lo que Mirtha dijo: "Pero se fueron del país...".
"Sí, es raro porque yo no los eduqué para que se vayan. Viste que hay padres que dicen 'yo quiero que se vaya...'. Yo en cambio, no. Para mi la familia es lo más importante. Y me mata porque lo que vivimos ya hace un tiempo, que tiene que ver con muchas cosas... Por ejemplo mi hijo, que es chef peroque hace un poco de todo, ahora está haciendo un entrenamiento de tenis, dando clases de tenis y viviendo en Madrid. Es un apasionado de la Argentina, hablamos todos los días...", agregó.
Y continuó, reflexionando acerca de las razones por las cuales muchos jóvenes están emigrando de Argentina en busca de nuevos y mejores horizontes.
"Mi hija, Giuliana se fue hace poquito, hace dos meses, está en Barcelona, es arquitecta y se fue a estudiar y a trabajar (...) Ella se fue por un tiempo pero cuando uno da tremendo paso, querés que vuelva pero... ¿qué le ofrecés para que vuelva? Se están yendo los jóvenes del país, por muchas cosas, por el trabajo, por la tranquilidad, por la economía, y por la ilusión también", dijo.
Palmiero admitió que la situación la entristece. "Yo estoy muy triste, tristemente feliz porque se que ellos están contentos, que tienen las posibilidades de poder hacer algo. Pero llega el domingo y quiero la familia", se quebró.
"La vida está hecha de presencias, no de ausencias", acotó Mirtha. "¡Claro! Entonces yo por más que los llamé por teléfono y les diga tomate un avión, los quiero abrazar y no puedo", agregó Flavia con la voz entrecortada.
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