Mica Viciconte compartió con sus seguidores una foto, la primera, de su casa nueva. La panelista de "Ariel en su salsa" se mudó hace pocos días a una nueva vivienda, tal como ella misma contó, más pequeña que la que ocupaban con su pareja, Fabián Cubero, su hijo Luca e Indiana Cubero, la hija mayor de Poroto.
La casa estaría ubicada en el mismo country de Escobar donde vivía la pareja desde hace siete años.
Viciconte explicó hace un tiempo que el alquiler había aumentado tanto que con su familia decidieron buscar otra propiedad para habitar, más accesible, mientras siguen construyendo la suya propia.
Hubo polémica en los medios hace algunos días porque ella misma habló acerca de la venta de muebles y objetos obtenidos por canjes publicitarios que no iba a llevar a la nueva casa ya que no "entraban". Aclarado ese punto, la panelista ya se instaló aunque aún no tuvo tiempo de acomodar los muebles.
Por tal razón, ella, su pareja y su bebé estrenaron habitación sólo con lo indispensable. "Colchón inflable y practicuna. No se necesita nada más", escribió la marplatense en la imagen que compartió en sus Historias de Instagram.
En la foto puede verse la habitación "pelada", solo decorada por un aplique de luz colgando del cieloraso pintado de blanco, color que contrasta con las paredes, decoradas con un tono verde cemento. Las ventanas tienen cortinas black out blancas y el piso es de madera flotante.
Hasta el momento la panelista no compartió más imágenes de su nueva vivienda aunque sí mostró la empresa de mudanzas que se encargó de llevar todas sus pertenencias.
Cómo se supo que Fabián Cubero y Mica Viciconte se iba a mudar
Fue a fines del mes de octubre cuando se supo que Mica Viciconte y Fabián Cubero estaban enfrentándose con un nuevo problema, esta vez relacionado con su casa de un country de Escobar, donde viven desde hace un tiempo.
Según contó Laura Ufbal en su portal de noticias en ese momento, la pareja -que convive con sus hijos Luca e Indiana-, estarían indignados por el aumento del alquiler y negociando para quedarse uno o dos meses más antes de poder mudarse a la casa que están construyendo en Nordelta.
El problema reside, siempre según la fuente, en que la propiedad nueva que está en obra aún no está en condiciones de ser habitada y, en caso de mudarse dentro de uno o dos meses, los Cubero van a tener que vivir por ejemplo, sin muebles bajomesada o alacenas en la cocina.
Y aunque la familia intente apurar a la empresa constructora, lo cierto es que por la situación económica reinante y la especulación propia de ciertos sectores comerciales, hay elementos que no se están consiguiendo. Por lo tanto, la construcción marcha a paso lento.
Mientras tanto, la pareja decidió solucionar el tema alquilando una propiedad un poco más pequeña y así seguir adelante con la construcción de la casa propia.
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