Casa Emma tiene un lugar muy especial en la historia de Gabriela Iturrioz: lleva el nombre de su abuela materna y se encuentra enclavada en el campo de su familia en La Pampa. Este hogar supo convertirse en un emblema con un profundo significado que se percibe apenas uno cruza sus puertas: la importancia de la conexión con los afectos y el vínculo con las raíces. Te invitamos a recorrerla y escuchar su historia en el video.
Volver a las raíces
La relación de Casa Emma con el campo no es poca cosa: se siente en cada rincón. Está situada entre las planicies de Quehué, una localidad muy pequeña de no más de 500 habitantes, donde el horizonte se funde con el sol y desde donde se presencian los mejores atardeceres rojizos que se contraponen con los colores naturales del pastizal pampeano.
La esencia del lugar es clara: con los años, se constituyó como un remanso de paz donde descansar en familia, desconectar de las rutinas y sumergirse en la tranquilidad y belleza del campo.
Además del estilo rural, posee reminiscencias a la decoración española entrelazadas con toques de la cultura tradicional argentina: “Tiene mucho que ver con lo que era Emma- confiesa Gaby a Para Ti DECO- Ella tenía un almacén de ramos generales en Quehué cuando mi mamá era chica. Ella llevaba adelante esa tienda donde vendía un montón de cosas lindas. De alguna manera su casa tenía muchas cosas originales, lo que quisimos fue replicarlas en esta casa azul que está en el medio de La Pampa”.
En cuanto a su estructura, Casa Emma fue construida en ladrillo tradicional. Tiene un revoque fino con relieve muy especial en su parte exterior que le da una distinción muy original. Su color, el azul, no es un color habitual para las casas de campo: “queríamos marcarla y destacarla del verde de la pradera o el amarillo del otoño de La Pampa, y posicionarla en ese lugar para verla de lejos”, explica Iturrioz.
La cocina apuesta por un carácter clásico con toques vintage donde se combina el dorado de las griferías con el de los herrajes, en conjunto con el piso que contiene un estilo calcáreo.
Empezó siendo algo sencillo, nos fueron llevando las emociones. Empezamos a elegir materiales, productos que nos gustaban... de alguna manera terminamos armando una casa que tiene mucho que ver con lo que era Emma.
Cuenta con mucha presencia de vidrio, hierro, madera, piedra. Los textiles, las alfombras, los colores de las cortinas permiten brindarle la calidez que necesita a un espacio que busca transmitir lo que significa para Gaby: compartir un momento muy especial con los afectos.
Su color no es un color habitual para las casas de campo. Queríamos destacarla en el verde de la pradera o el amarillo del otoño de la pradera de La Pampa. Es un espacio que te permite compartir, cocinar en familia, compartir una mesa con amigos, disfrutar del fuego de la chimenea en invierno.
Esperamos que esta casa de alguna manera sirva de encuentro para varios, no solamente para nuestra familia, nuestro círculo íntimo o para encontrar momentos de descanso, sino también para compartir momentos de alegría que siempre son tan importantes en los equipos de trabajo.
Historias en cada detalle
Bajo la premisa de presentar la colección otoño invierno de El Galpón del Edén (@elgalpondeleden), el emprendimiento de la familia de Gabriela, sus productos enlozados forman parte de la decoración adecuándose a la perfección con el estilismo de la casa.
“Nada mejor que un lugar que nos identifica, que nos representa para poder mostrar los productos que El Galpón tiene que ofrecer para esta temporada- cuenta Gaby- De alguna manera los productos en un ambiente tan campestre y natural que encontrás en Casa Emma, te permite vincular esos productos que pueden decorar tu casa a la hora de compartir un asado con un estilo de tranquilidad, descanso, relajamiento”.
Casa Emma tiene que ser un lugar de encuentro, de agasajo, de disfrute... no solo de la familia sino también de los compañeros y de los que hacemos día a día para El Galpón del Edén.
Iturrioz resalta la emoción detrás de cada una de las piezas: “Intentamos que los diseños y la estética del producto remita a lo que queremos contar. Con estos productos lo que hacemos es contar historias personales, de nuestra infancia y de nuestro vínculo con nuestras abuelas”. De alguna manera, los productos son el resultado final de una trayectoria familiar sumamente especial y que ahora decoran el corazón de la historia: Casa Emma.
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Video y postproducción: Candela Petech
Fotos: @florevangelista.ph